Medori entra a canasta ante la oposición de un defensor del Espanyol. | Alejandro Mellon

El Sa Real Instalaciones Arévalo ha conseguido este sábado un triunfo vital. Los ibicencos han superado al Espanyol (87-80) con un partido muy serio en el que supieron tirar de veteranía cuando tocaba para que la victoria se quedase en la isla.

El choque empezó con el conjunto catalán más enchufado, pero no tardarían en apagar el fuego los colegiales, que tomaron el mando en el ecuador del primer cuarto. A partir de ahí, intercambio de golpes del que salió vencedor el conjunto pitiuso que cerró el primer cuarto con el 26-21.

El segundo cuarto arrancó como el primero y el Espanyol tomó el mando. Llegaron a irse de cinco puntos (32-37), pero los locales volvieron a reaccionar para mandar el choque con ventaja al descanso. 47-43 y todo por decidir en este partido entre dos equipos que pelean por mantener la categoría.

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A lo largo del tercer cuarto ninguno de los dos equipos pudo imponer su juego. Seguía el intercambio y el duelo entró en el último cuarto con una ligera ventaja para el Sa Real (67-64).

En el último parcial, el Espanyol apretó para intentar darle la vuelta al marcador, llegó a ponerse a un punto en varias ocasiones, pero los de Piqueras conseguían abrir hueco cada vez que se daba esto. Fue un toma y daca que se rompió en los últimos minutos. Sólo cuando llegó la ventaja de 10 puntos (85-75) a falta de un minuto hubo tranquilidad en las filas ibicencas.

Al final, victoria local. Un triunfo importantísimo que les permite alcanzar en la tabla a un rival directo y coger un poco de aire en esa pelea por la permanencia.