Los ibicencos, con los que debutó como titular Roger Serrano, se adelantaron en el marcador a los ocho minutos de juego por mediación de Vicent Valdés, que voleó a la red un saque de banda ejecutado por Faly. Ambos equipos habían protagonizado llegadas de peligro, pero el primero en golpear fue el cuadro local.
En los últimos dos minutos, Miguel León pidió protagonismo con dos goles en poco más de 10 segundos. Primero, marcó a puerta vacía a pase de Iker tras una jugada de tiralíneas, de esas que deben enseñarse a los más pequeños para que comprendan la importancia del juego al toque. Acto seguido, una pronta recuperación de los pitiusos con la presión alta permitió a Miguel León marcar desde el costado derecho.
Tras el descanso, Miguel León puso más tierra de por medio. A los cuatro minutos, recuperó la pelota cerca de su propio área y la condujo hasta lanzar un zapatazo raso desde unos 12 metros que superó al portero.
Con 4-0 en el marcador, el cuadro catalán decidió sacar el portero-jugador cuando aún quedaban más de 12 minutos por delante. Los visitantes redujeron distancias a la media hora de juego, pero no por su efectividad jugando de cinco. Un tremendo error defensivo del Gasi permitió a Manucho disparar a placer en el área pequeña para dar algo de suspense al partido.
El equipo de José Fernández no tenía ganas de pasar ningún mal rato en un partido que tenía tan controlado y se encargó de abortar cualquier atisbo de remontada rápidamente. Una larga y maravillosa jugada de los locales la finalizó Usama a placer a pase de Iker para firmar la ‘manita’.
Los celestes aún no habían dicho su última palabra. Karpiak se sumó a la fiesta con un gol desde su propia portería aprovechando que había detenido un ataque de cinco. Con el sexto gol se acabó el duelo. Set y partido.
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