El balonmano ibicenco vive sus años más dorados. El HC Eivissa está ya más que asentado en División de Honor Plata. Un ejemplo para toda la base de un club que cuenta con más de 200 fichas federativas y que es el orgullo de Baleares.

Este fin de semana celebraron el acto de presentación de las plantillas y desde el club destacaron que viven unos tiempos de consolidación. «Desde la pandemia se estableció un objetivo de crecimiento y estabilidad en todas las categorías de la base. Y así se ha ido cumpliendo hasta día de hoy, especialmente en los equipos de categoría femenina donde tenemos equipos con un gran número de jugadoras», explicó Jaume Marí.

El presidente del club destacó que el trabajo de promoción por parte de la coordinación del club ha sido constante cada temporada y a esto se ha sumado la colaboración con el Handbol Club Puig d’en Valls en los equipos de categoría sénior femenino y masculino, la creación de un nuevo Club Deportivo Joan XXIII con un acuerdo de filialidad y un nuevo grupo de trabajo en el colegio Liceo Francés.

El proyecto de División Honor Plata está en su quinta temporada y desde el club hacen hincapié en que es «un reto importante y difícil ya que la categoría se ha ido profesionalizando y hace que el objetivo de permanencia sea cada año más complicado. Pero sabemos que este esfuerzo merece la pena ya que indirectamente es un beneficio para la base».