Bodí se prepara para ejecutar un disparo durante el HC Eivissa-Sinfín. | Irene Arango

El Trasmapi Gobycar Citubo UD Ibiza HC Eivissa (HCE) cayó este martes eliminado de la Copa del Rey por un apretado 29-30. El equipo ibicenco pagó caro su fatal inicio contra el Blendio Sinfín Santander, un arranque que disparó a los visitantes muy pronto en el marcador. Con todo, los ibicencos se dejaron la piel la pista para tratar de remontar y no anduvieron lejos, pero la losa era demasiado pesada y no hubo milagro.

Eugenio Tilves pedía más precisión a los suyos en ataque, pero esta no llegó en los primeros compases del duelo. El HCE necesitó más de cinco minutos para marcar su primer gol por mediación de un Basualdo que subió el 1-3 al marcador. De nuevo se le bajó la persiana al cuadro pitiuso, que no hallaba la forma de penetrar la meta rival y veía como su adversario se escapaba de siete goles (1-8, min. 15).

Casi diez minutos después de su único gol, Chychykalo se encargó de poner fin a la sequía goleadora de los suyos al transformar el 2-8. Bodí y el propio Chychykalo asumieron la responsabilidad y guiaron a los suyos hacia la escalada, impidiendo que los cántabros dejaran el partido visto para sentencia al descanso. El 11-16 con el que terminó la primera parte no era precisamente el peor resultado después de lo visto en esos 30 minutos.

Tras el asueto, el equipo de Eugenio Tilves salió más enchufado. De hecho, provocó que el Sinfín pidiera un tiempo muerto tras poco más de tres minutos de juego, señal inequívoca de que las cosas no le estaban gustando a los visitantes.

El HC Eivissa llegó a ponerse a tiro de dos goles en varias ocasiones, rompiendo esa barrera psicológica de tres goles (17-19, min. 38; 24-26, min. 53, y 26-28, min. 54) hasta que, por fin, metió el miedo en el cuerpo de su rival igualando el partido en la recta final.

Quedaban tres minutos por delante y el electrónico reflejaba un 28-28 después de un tanto de Galán. Precisamente este jugador tuvo la prórroga en sus manos cuando, a falta de 15 segundos y sobre un aviso de pasivo, lanzó completamente solo en un mano a mano con el portero, que le adivinó las intenciones. Ahí murieron las opciones de clasificación del HCE.