«Creíamos que Puma iba a ser el entrenador, pero desgraciadamente no va a ser así», dijo Alberto Pérez, presidente del club, durante la rueda de prensa de despedida del míster. «Cuando acabó la temporada, Sergio Tortosa le ofreció la posibilidad de seguir con nosotros porque creíamos que su trabajo había sido increíble. Nos ha hecho soñar hasta el último minuto», expuso.
En una línea similar se pronunció Tortosa. El director deportivo indicó que, desde que arrancó el proyecto, «sabía que iba a dar rendimiento». «Los resultados están ahí. Estoy muy contento y orgulloso del trabajo que ha hecho. Nos ha hecho crecer como club. La temporada ha sido fantástica», dijo.
Sobre los motivos de su adiós, Puma explicó que «la familia tira». «Tengo mujer y una niña, y aparte tengo un negocio con muchos trabajadores. Lo he dejado diez u once meses y la verdad es que hay cosas que no se pueden dejar más tiempo. Hasta última hora estuve dándole vueltas. Lo que hay es lo que hay. Me llevo muchos amigos y estoy muy contento por el año que se ha dado», señaló.
El sevillano quiso «dar las gracias a todos los que han estado ahí para lo bueno y lo malo». «Me llevo unos grandes amigos. Seré el primer socio del Ibiza el año que viene», continuó el preparador, que se quiso quedar con lo positivo: «Hemos estado hasta los dos últimos minutos metidos en zona de play off». El ya exentrenador del Cedé aprovechó la ocasión para transmitir sus ánimos a Óscar Troya, técnico del Poblense: «Fútbol es fútbol, pero la vida te da también palos y hay cosas más importantes que el fútbol. Desde aquí quiero darle mucha fuerza y desearle suerte al igual que a los demás equipos que jugarán el play off».
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