El futuro está en sus manos

Los que lo conocen saben que siempre apuntó maneras. Pese a tener sólo 13 años lleva mucho tiempo dedicado a este deporte. Comenzó con cuatro años con un maestro más centrado en las técnicas. Uuna vez que se retiró éste, dio el salto a Nusi Marín. Con su nueva entrenadora comenzó a dedicarse al taekwondo de competición. «Desde el principio evolucionó muy bien. Empezó a destacar muy pronto», señala su entrenadora.

Marín destaca que se trata de un joven con muchas ganas: «Es un niño muy disciplinado, no falta a sus clases y entrena nueve horas semanales; en competición, más. Se nota que ama este deporte, es muy constante y muy exigente consigo mismo. Siempre quiere un poco más».

En su casa, el espacio para las medallas se empieza a quedar pequeño. Dani ya ha ganado varios campeonatos locales y también cuando sale a la península muestra su calidad. La plata conseguida en el autonómico, cuajando un gran campeonato, ha hecho que los técnicos de la selección balear se fijen en él y lo hayan llamado para una cita que aún no tiene sede confirmada, pero que todo el mundo espera que sea en Castellón.

La próxima semana comenzará los entrenamientos con la autonómica para preparar este campeonato. Nusi saca pecho cuando habla de su pupilo: «Para mí, yo que tengo tres clubes, es un orgullo. Tener casi 200 licencias y, entre ellas, un deportista como Dani es un orgullo. Estoy convencida de que traerá un buen resultado del Campeonato de España».
Por su parte, Balboa reconoce que intentará conseguir una medalla, pero que lo importante será «disfrutar de la experiencia y mejorar». Señala que lo principal será regresar a Ibiza con la sensación de estar satisfecho con el trabajo realizado.

Daniel conoce su mejor arma: «Sinceramente, lo que mejor hago es golpear fuerte». Del mismo modo, también es consciente de algo mucho más difícil, sus flaquezas: «Tengo que mejorar la velocidad y olvidarme de pegar tan fuerte para poder regular la fuerza y marcar puntos».

A pesar de su juventud, ya ha tenido sus primeros desencuentros con este deporte que tanto ama. Reconoce que hace unos años, cuando estaba empezando, lo apartó por el fútbol porque pensaba que era demasiado duro, un desamor que duró poco: «Ninguno de los otros deportes me ha llenado tanto como el taekwondo». «Lo que más me gusta es el compañerismo que hay. Eo es lo que más me ha hecho avanzar. Poder superarme a mí mismo cada día más me llena», destaca.

Sobre el futuro, el joven es ambicioso: «Me gustaría dedicarme a la competición y poder llegar a lo máximo, a los Juegos Olímpicos. Es un sueño. También me gustaría tener mi propio club y poder dar clases».

Aún queda mucho por delante para poder llegar a estas metas. El primer paso puede empezar a finales de junio en su primer Campeonato de España.