Una imagen de la reunión entre los clubes y la delegación insular celebrada anteayer en la sede de esta última.

La decisión de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) de ‘romper’ relaciones con el Consell d’Eivissa en lo que al fútbol escolar se refiere no ha tardado en encontrar una primera respuesta. Fernando Gómez, director insular de Deportes, telefoneó ayer por la mañana a Vicente Bufí, presidente de la delegación pitiusa de la FFIB para conocer al detalle la problemática existente y ofrecerse a asistir a la reunión del próximo lunes en la sede insular de la FFIB. En ella, los clubes, que deben aceptar la presencia tanto de Gómez como del conseller David Ribas, tomarán una decisión firme sobre el rumbo del fútbol escolar.

«He llamado a Bufí y nos hemos ofrecido el conseller y yo a dar explicaciones personalmente el lunes. Si a los clubes les parece bien, allí estaremos», indicó el director insular de Deportes. «He escuchado la problemática que me planteaba e intentaremos buscar alguna solución y agilizar las subvenciones», agregó.

En este sentido, recordó que los retrasos en el convenio vienen dados «por la burocracia, que siempre nos pasa, y los papeles que se piden. «Viene dado por la ley que sacó el PP por la que tenían que estar dados de alta en la Seguridad Social los árbitros y entrenadores de categoría amateur. El que va a entrenar un equipo infantil, por hacer un favor como quien dice, y recibe 100 euros por gasolina, pues tiene que estar dado de alta, cosa que no es lógica porque cuesta más la Seguridad Social».

En cuanto a las subvenciones, Gómez comentó que «se están acelerando». «El año pasado se pagó en diciembre. Aún hay margen, pero estamos buscando otra solución».

Como publicó ayer este rotativo, los clubes pitiusos y la delegación evidenciaron el lunes un gran malestar por los obstáculos con los que se ha topado esta última. Bufí advirtió que la categoría juvenil ya no entra en el deporte escolar; que en el Consell de Mallorca y el de Menorca no ponen tantas trabas como aquí, donde se está exigiendo una documentación que va en contra de la ley de protección de datos; y que la FFIB está dispuesta a organizar competiciones federadas sin entrar en el programa de Deporte Escolar del Consell si los clubes están de acuerdo.

Esto último supondría un gasto extra de entre 1.000 y 5.600 euros por club, según el número de equipos, en concepto de arbitraje, ya que el Consell tiene una línea de subvención para ello. Si, el próximo lunes, los clubes optaran por la vía del Consell, entonces dicha institución tendría que hacerse cargo del deporte rey en categoría escolar sin contar con la FFIB ni sus árbitros, viéndose obligada a realizar los calendarios, organizar los horarios y buscar los árbitros pertinentes.

Además, la delegación insular informó que aún se le adeudan alrededor de 80.000 euros entre diferentes líneas de ayuda.