Una goleada para disipar dudas

Desde el minuto uno los celestes demostraron que no tenían intención de dejarse otra vez los puntos. En el minuto 13, Cirio adelantó a los de Toni Amor con un remate a la salida de un córner. En la primera parte, los ibicencos pudieron poner tierra de por medio, pero no materializaron las ocasiones que tuvieron. El Alcúdia tampoco inquietaba la portería de Manolo y, así, se llegó al descanso.

En la segunda mitad, el partido siguió la misma tónica. Los visitantes se mostraron muy serios en defensa sin conceder ocasiones. La mala noticia llegó en el minuto 60 con la lesión de Manolo, que tuvo que ser sustituido. En su lugar entró Jesús.

Poco después, Terán se encargó de abrir hueco al aprovechar un buen pase de Gámiz. El fino extremo volvió loca a la defensa local nueve minutos más tarde para reventar el partido con el segundo de su cuenta, un gol que sumado a la expulsión de César, dos minutos más tarde, mató el partido.

Aún hubo tiempo para que Álvaro Muñiz, desde dentro del área, pusiera el cuarto antes del final. Con el marcador sentenciado, Toni Amor movió el banquillo para dar descanso a sus jugadores.

El 0-4 hizo justicia a lo visto sobre el terreno de juego. Los puntos y las sensaciones serán un estímulo para el conjunto celeste, que ha perdido la primera posición y que todavía depende de sí mismo para acabar la temporada como líder. El Mallorca B tiene que visitar Can Misses. La siguiente jornada será en casa ante el Mercadal, un rival de la zona baja de la tabla.