El conjunto de natación sincronizada le dio ayer a España, en la final del ejercicio técnico de equipos, su primera medalla, una de plata, en los Mundiales de Natación que se disputan en Roma.

Las españolas conservan la jerarquía internacional que tienen desde hace dos años y que certificaron el año pasado cuando en los Juegos de Pekín 2008 lograron dos medallas de plata después de las rusas, que ayer volvieron a subir a lo más alto del podio en el Foro Itálico de Roma.

Ni siquiera hizo falta que la seleccionadora española, Anna Tarrés, recurriera a la estrella del conjunto, Gemma Mengual, que no nadó esta mañana. La seguridad en su ejercicio y en sus nadadoras es sobresaliente.

El equipo español estuvo formado por Ona Carbonell, Raquel Corral, Margalida Crespí, Andrea Fuentes, Thais Henríquez, Paula Klamburg, Irina Rodríguez y Cristina Salvador, una de las incorporaciones españolas, de 17 años, y que rompió a llorar tras escuchar la puntuación, 97.883, que le daba la primera medalla en una competición de este nivel internacional.