La decisión tendrá que esperar, al menos 15 días. Ese es el nuevo plazo que se han concedido Jordi Fernández y el CB Puig d'en Valls después de la reunión mantenida ayer por el entrenador catalán y su cuerpo técnico -el preparador físico Alejandro García y la fisio Ana López- con los directivos del club. El motivo de alargar tanto la renovación del técnico es que, hoy por hoy, el PDV no puede presentar ninguna oferta debido a la crisis económica, y se da ese tiempo para intentar cerrar algún acuerdo con un nuevo espónsor. «La situación económica está igual de mal que siempre, pero por lo menos la predisposición del club es buena y veremos si se resuelve alguna cosa en este periodo», afirmó ayer Jordi Fernández.

El entrenador catalán sabe que no hay garantías de que la situación mejore en este tiempo. «No hay ningún compromiso por alguna de las dos partes, aunque estoy convencido de que si el club puede hacernos una oferta seguirá contando con nosotros. Es algo lógico y que nos hemos ganado después del trabajo de Alejandro y Ana en los dos últimos años y del mío propio en estas cinco temporadas, que creo que ha sido muy bueno. Si finalmente esa propuesta no llega sabemos que será por una cuestión puramente económica», añade.

Compás de espera

Por su parte, el presidente del PDV, Vicente Torres, reconoce que «con el presupuesto con el que contamos para la próxima temporada es imposible plantearse renovar al actual cuerpo técnico. Por eso vamos a esperar un poco, a ver si la situación mejora en las dos próximas semanas». El club lleva tiempo buscando una empresa que se haga cargo del patrocinio en sustitución de EBE Promociones. «Sin embargo, cada vez está más difícil y parece que va a peor. Por eso hemos quedado con Jordi que si a ellos les sale alguna cosa pueden aceptarla libremente, aunque a día de hoy tampoco tienen ninguna propuesta, porque los clubes están pensando más en cómo acabar esta temporada que en planificar la siguiente», dice el máximo dirigente.