El español Fernando Alonso (Renault) marcó el ritmo durante en la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Brasil, última cita del Mundial de Fórmula Uno, mientras que el brasileño Felipe Massa (Ferrari) se cargó de moral en su desesperado intento por arrebatar el título al líder, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes).
El piloto asturiano marcó en la sesión vespertina el mejor tiempo de toda la jornada. El crono de 1:12.296 lo logró en su último intento para superar por sólo 57 milésimas de segundo a Felipe Massa, que por la mañana había sido el más veloz.
El español fue sexto en la tanda matinal, pero en la de la tarde volvió a dar muestras de la mejoría experimentada en su R28. Durante la segunda tanda Alonso estuvo haciendo diversas pruebas, siempre con neumáticos blandos usados, en busca del mejor equilibrio posible en su monoplaza con vistas a la carrera de mañana.
Objetivo
Por ese motivo Alonso, que tiene como objetivo cerrar el ejercicio con un podio, estuvo marcando tiempos discretos, hasta que en su último intento montó neumáticos blandos nuevos que le permitieron dar una vuelta perfecta con la que trepó desde el decimoctavo al primer puesto y desbancó de la primera plaza a Felipe Massa.
El piloto brasileño, que en el circuito de Interlagos necesita acabar en alguna de las dos primeras plazas y esperar después un fallo de Hamilton, que le aventaja en siete puntos, completó una brillante primera jornada de entrenamientos libres, en los que siempre estuvo por delante del británico en una jornada marcada por las bajas temperaturas y una ocasional y ligera llovizna.
Massa, espoleado siempre por su público, rodó por la mañana en un tiempo de 1:12.305 y aventajó en 190 milésimas al líder del Mundial, que mañana sólo necesita acabar entre los cinco primeros para hacerse con el título.
Y por la tarde el piloto paulista estuvo siempre en cabeza de la tabla de tiempos hasta que Alonso lo apartó del primer lugar con minuto y medio para el final. Hamilton terminó noveno por la tarde a poco más de medio segundo.
De momento los temores de Massa a las bajas temperaturas no se están cumpliendo, y su Ferrari, sobre todo los neumáticos, se están mostrando bastante competitivos en su objetivo de ganar por segundo año consecutivo el gran premio de su país, esta vez con el título de campeón como premio más deseado.
El actual campeón mundial y que mañana tendrá sucesor, el finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari), fue tercero por la mañana, en la que fue el único en tener dificultades (un trompo), y cuarto por la tarde.
El italiano Jarno Trulli (Toyota) consiguió colocarse en la segunda tanda en la tercera plaza, pese a haber amanecido con molestias estomacales que le dejaron bastante mermado físicamente.
Hoy se disputará la tercera y última sesión libre, que dará paso a la de clasificación, que establecerá el orden de salida del decimoctavo y último gran premio de al temporada.
Realista
Alonso no cree que el registro obtenido ayer sea real, ya que está convencido de los Ferrari y los McLaren siguen estando por encima del resto.
«Hoy ha habido momentos en los que sí parecía que éramos competitivos y estábamos a unas pocas décimas de los mejores, pero luego, en otras, estábamos a seis o siete décimas de los buenos en las tandas largas, y eso es demasiado. Las segunda o la tercera fila es lo máximo a lo que aspiramos», dijo el español.
«Tenemos que mejorar algo el coche esta noche, intentar buscar algún reglaje nuevo para mañana -hoy para el lector-. Hay que llegar a la crono en las mejores condiciones posibles. Si mañana puedes arañar una o dos décimas puedes ganar muchas posiciones. A unos minutos del final estaba decimoctavo, y poco después estaba primero. Ni lo uno ni lo otro. Ni estábamos tan mal para estar tan atrás, ni tan bien como para estar primeros», agregó.
Alonso cree que la lucha por el Mundial, entre Hamiltony Massa, sigue como estaba tras la primera jornada en Brasil: «Está exactamente igual».
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