R. J. Palomo El piloto ibicenco José Joaquín Fernández afronta este fin de semana la primera prueba del Campeonato de España de Rallies de Montaña en la Subida a la casa de Cristo-Moratalla, en Murcia. Tras el espectacular segundo puesto en la Copa de España grupo N y su octava plaza en el campeonato de España de conductores la temporada pasada, el objetivo de Fernández es superar a su principal rival y campeón en la pasada edición, Francisco Javier Agüí, y acabar entre los cinco mejores conductores del Campeonato de España.

«El año pasado fue estupendo pero intentamos buscar presupuesto para mejorar el vehículo y poder optar al campeonato que se nos escapó por dos puntos con Agüí», señala el piloto pitiuso. Sin embargo, el escaso apoyo de los esponsors ha hecho que su Mitsubishi Lancer Evo IX no haya podido evolucionar en los últimos 11 meses y que su presencia en el campeonato pendiera de un hilo. «Hemos conseguido cubrir a duras penas el presupuesto para acudir a la primera prueba porque con esta, proclamada, crisis sólo 'Fiesta Hoteles' ha renovado con nosotros. No sé por qué no tengo más ayudas. Yo lucho pero la gente pelea muy poco y los que te ayudan se creen que te dan la vida. Cada carrera sale por más de 2000 euros y sin llevar técnicos. Con la ilusión no se corre, pero no perdemos la esperanza y mi deseo es dejar el pabellón ibicenco por todo lo alto», afirma Fernández.

Este fin de semana, el Mitsubishi de J. J. se estrena en Murcia, en la subida a la casa de Cristo-Moratalla, en la que Agüi podría ser baja. «Esperamos ganar en Moratalla porque, en principio, Agüí no va a comparecer y, salvo sorpresa, deberíamos ser los mejores», reconoce el piloto, que asegura sobre el trazado de la subida que «es muy técnica, estrecha y bacheada. No te puedes permitir despistes, son trazados difíciles y complicados».