El árbitro amarga las Navidades

Goles: 0-1, minuto 86, Jaime.
Incidencias: Municipal de Santa Eulària, unos 200 espectadores. El ex jugador de la Peña Guillermo Vallori, que milita en el Grasshopper suizo, entregó una camiseta de su actual club a la entidad ibicenca y realizó el saque de honor.

Rubén J. Palomo|SANTA EULÀRIA
Los condicionantes externos juegan un papel protagonista en los partidos de fútbol. En ocasiones es la fortuna la que aparece en escena para decantar un resultado y, normalmente, la superioridad de uno de los contendientes define el devenir de un partido. En la tarde de ayer el condicionante que llevó al declive de la Peña tuvo nombre propio: Alberti Oñati. El colegiado balear fue un escollo más peligroso que Nsúe, Oller y compañía y su actuación perjudicó claramente el planteamiento de los de Dani Mori.

El partido arrancó con un Mallorca B fuerte en medio campo y vertical en las bandas. Los hombres de ataque de Bouzá presionaban la salida de balón de la Peña, que apenas inquietó la meta de Andrés en la primera media hora. Las ocasiones no llegaban y el partido caía en la tónica habitual de los duelos de Tercera: pérdidas de tiempo, faltas y pelotazos al aire. En el último cuarto de hora de la primera mitad Tino despertó y con él el conjunto local. Dos buenas llegadas del valenciano precedieron una de las jugadas clave del choque. Manolo Aparicio aprovechaba un balón al hueco para entrar en carrera en el área ganando la espalda a Noceras. Éste le trabó y el lateral cayó al suelo. Penalti como una catedral para todos menos para Oñati, que amonestó a Manolo por su acción.

En la reanudación la Peña intentó romper el partido con un tanto pero todo se truncó con la justa expulsión de Villodre en el 62' por doble amonestación. El colegiado no dudó en esta ocasión, como tampoco le tembló el pulso para sancionar con falta todo lo que olía a ibicenco. En el 68' llegó la otra intervención divina del trencilla. De su imaginación salió un penalti sobre el desaparecido Nsúe, que sólo pudo frenar el juez de línea al señalar fuera de juego. Sin embargo, el asistente no fue tan valiente para anular el gol de Jaime en el 86', que partió de un posible fuera de juego para batir a Moro y darle los tres puntos al filial mallorquín.