Europa Press
El seleccionador nacional, Luis Aragonés, incluyó cinco caras nuevas en el presumible equipo titular que se medirá mañana a San Marino en la sesión preparatoria realizada ayer en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, en la que Carles Puyol y Vicente protagonizaron un penoso incidente, llegando a las manos tras un lance del partidillo de entrenamiento. Ambos internacionales mantuvieron un pequeño roce, con empujones y codazos, después de que Puyol, en el equipo titular, protegiese de manera enérgica un balón en la banda izquierda ante Vicente, con el peto verde de los suplentes. El valencianista sufrió un codazo del central catalán y después de levantarse del suelo le respondió con un manotazo y ambos se enzarzaron en un pequeño rifirrafe hasta que Villa y Sergio Ramos, y de inmediato el capitán, Raúl, separaron a los dos jugadores.

Luis Aragonés, por su parte, destacó que «en los primeros treinta minutos» ante Bélgica sí se vio eliminado del Mundial, pero destacó que la reacción del segundo tiempo y ganar fue la mejor noticia de la noche en Bruselas. «De fútbol y medicina todo el mundo opina», dijo Luis, al ser cuestionado por las variantes tácticas que expresan los medios de comunicación. Para el partido de San Marino, Luis dijo que Joaquín y Vicente se encuentran bien físicamente y «aún es pronto para dar la alineación, no la sé todavía». «En un partido puede haber cambios, puedo comenzar de una forma y proseguir luego de otra», afirmó Luis. Para Luis, «San Marino es una selección inferior, ganarle por dos o tres es asequible, pero marcarles más de 4 ó 5 es difícil, salvo Bélgica que le hizo 8, todos los demás resulyados han sido de 3, 4, ó 5 goles de diferencia», apostilló Luis Aragonés.

Además, bajo la presencia de una ligera llovizna, Aragonés probó con cinco jugadores que no fueron titulares ante Bélgica. En principio, si el seleccionador ratifica la alineación del partidillo dentro de 48 horas, Joaquín, Vicente y Marchena serán los grandes damnificados de la versión ofrecida por España ante los belgas. Joaquín dejaría su lugar a Iván de la Peña, que jugaría más centrado, y Vicente a José Antonio Reyes, uno de los mejores el pasado sábado. Además, Luis Aragonés dejaría a Albelda como único centrocampista de contención para darle salida a Villa en la punta de ataque junto a Raúl y Fernando Torres, e incrementar así el potencial de una selección que debe golear para mantener sus opciones de entrar por vía directa en el Mundial de Alemania. Además, el rojiblanco Pablo sustituiría a Marchena en el eje de la defensa, y el madridista Sergio Ramos a su compañero de equipo Míchel Salgado, sancionado, en el lateral diestro. La selección partirá hoy hacia San Marino, donde juega su último partido de la fase de clasificación mundialista con la necesidad de ganar para asegurar la repesca y de golear para esperar un favor bosnio y celebrar su pase directo a Alemania.

Por otra parte, el 48,3 % de la audiencia de televisión, un total de 6.322.000 espectadores, siguió el encuentro del pasado sábado entre Bélgica y España. Este encuentro fue el choque de clasificación de la selección española más visto desde 2003, y llegó a alcanzar un 51,7 por ciento de cuota de pantalla y 8.590.000 televidentes.