TRAVESAS UNIÓ ESPORTIVA SARRIÀ: Mayola, Masmiquel, Galindo (4), Albert Solé (2), Pina (3), Esperraguera (1), Jordi Rodriguez (2) -equipo inicial- También jugaron Perals, Carles Solé (4), Llausás (4), Pasqui (2), Palomares (1), Brugué y Xavi Rodríguez (4).

HC EIVISSA: López, BufI (1), Rodríguez (2), Suárez (2), Cardona (6), Vallmitjana (4) y Mallo (2) -equipo inicial- También jugaron Rubio, Chaler, Ferrer (2), Miguel (1), Patricio y Roig.

Parciales: 1-1 (5'); 3-1 (10'); 4-2 (15'); 7-4 (20'); 9-7 (25'); 12-8 (30') -descanso- 15-11 (35'); 18-15 (40'); 21-16 (45'); 23-17 (50'); 24-19 (55') y 27-20 (60') -final-

Àrbitros: Pecos y Hewituvi, del Colegio Catalán.

Incidencias: Municipal. 200 espectadores.

Àrea 11
El HC Eivissa debutó en la Liga regular con una derrota contundente contra el Travesas Sarrià en un partido en el que la defensa de los gerundenses fue decisiva en muchas fases del partido. El club ibicenco se vio superado una y otra vez por una defensa 6-0 de los locales que no les daban opciones fáciles de tiro.

No es extraño que en el primer cuarto de hora del partido los pitiusos no pudieran pasar los dos goles en su tanteador. Por lo menos para alivio del Eivissa, el Sarrià tampoco hizo muchos más goles, a pesar de hacer un buen partido en defensa.

Y es que los catalanes les costaba mantener la calma y jugaban de manera precipitada en el ataque desaprovechando claras ocasiones delante de López, lo que hizo que los ibicencos mantuvieran la esperanza al llegar a los 25 minutos de juego con sólo dos goles de desventaja (7-9), una diferencia superable.

De todas maneras, unos goles de los hermanos Solé y de Xavi Rodríguez hicieron que los ibicencos se fueran al descanso con cuatro goles de desventaja. Había que reaccionar si no querían acabar de perder el partido en su debut esta temporada en la Primera Nacional.

Pero en la segunda parte la tónica fue la misma que en la primera. El Travesas Sarrià hizo gala de su excelente defensa y anuló los potentes ataques de Cardona, que aún así hizo un excelente partido con seis goles. De todas maneras, el conjunto catalán se instaló en los cuatro goles de ventaja, una diferencia que no bajaría hasta en los minutos finales. Los visitantes no arrojaron la toalla hasta en los últimos cinco minutos. En ese momento, cualquier intento de remontar del Eivissa se comenzaba a antojar como una misión imposible ante la fortaleza de la defensa catalana.