El Barcelona, entretanto, con un gran puñado de futbolistas con
clase, afronta uno de los grupos más fáciles, con escaso glamour.
Panathinaikos, Werder Bremen y Udinese. Asequible sin duda para uno
de los firmes aspirantes al título.
Por fin el Lyon llega a España. No está ya en el banquillo Paul
le Guen. Y eso es un dato a favor del Madrid. Se asoma Gerard
Houllier y está por ver en Europa si el estilo auténtico, ofensivo
y creativo del Olympique se va a repetir este año.
Fue el Lyon el equipo más bonito de la pasada competición. No
fue el mejor. Pero sí puso el fútbol con un centro del campo
espectacular: Govou, Diarra, Essien, Juninho Pernambucano, Malouda.
Ya no estará Essien, que emigró al Chelsea por culpa de 38 millones
de euros. Pero ha llegado Pedretti, un futbolista con talento e
ilusión.
La gran búsqueda del Lyon este verano ha sido encontrar un nueve
de garantías para proseguir con su escalada a nivel continental. Lo
intentó de nuevo con Fernando Morientes. No se rinde. Le Guen lo
pidió el año pasado, Fernando optó por ir al Liverpool y este
verano volvió a la carga. Al final, fue John Carew, el que abandonó
Estambul y el Besiktas para intentar rozar el sueño de ganar la
Liga de Campeones esta temporada. Olympiakos, con Rivaldo, y todo
un clásico en la Champions, el Rosenborg noruego, animarán un poco
el grupo F. Pero poco a priori. El socio del Madrid disfrutará
viendo al Lyon, un grupo de futbolistas unidos por el buen trato
del balón.
En el grupo G llega la traca. No puede ser más interesante para
la gente que acuda al estadio Manuel Ruiz de Lopera. Viajes a
Londres y a Liverpool, donde el Chelsea y el equipo de Rafa
Benítez, el vigente campeón, van a poner al Betis en el escaparate
del fútbol europeo. Una proeza para los de Serra Ferrer, los peor
parados en el sorteo, que también les emparejó con el Anderletch
belga, un histórico que se presenta como el rival más asequible en
la competición que supone su debut en el mayor espectáculo
futbolístico del mundo.
En el grupo D, más fútbol del bueno. El Villarreal está en
Europa y si aparece por primera vez en su historia es para pelear
con los mejores. El aficionado de Villarreal es el gran beneficiado
por el desenlace de un sorteo que ha acabado de codear a los
castellonenses con lo mejor de la competición. Tendrá caviar en El
Madrigal. Y un desplazamiento a Old Trafford con el United es un
lujo sólo al alcance de los elegidos.
Y el Villarreal lo es. Con Román Riquelme al frente y con Diego
Forlán arriba, premio EFE al mejor sudamericano, el Villarreal
tiene buena pinta, pero ya vivió en primera persona la dificultad
que tuvo para dejar en la calle al Everton, un equipo de mitad de
tabla de la Premier League. El Benfica de Ronald Koeman completa el
grupo con el Lille, la gran incógnita y a priori la cenicienta de
la que debe sacar provecho un Villarreal que quiere seguir
creciendo en Europa después de haber adquirido rango suficiente
como para entrar en el segundo bombo del sorteo celebrado ayer en
Montecarlo.
Precisamente el Lille ha anunciado que jugará sus encuentros de
esta competición en el Estadio de Francia, ya que su campo ha sido
inhabilitado por la UEFA para jugar sus torneos. La directiva del
Lille ha tenido que esperar hasta la fecha del sorteo ya que Saint
Dennis no podría albergar un hipotético partido el día 7 de
diciembre, fecha ocupada por el rapero Eminem para dar un concierto
en la capital francesa. Afortunadamente para los directivos del
club francés, ese partido lo jugarán fuera de casa, en Castellón,
frente al Villarreal de Riquelme y Forlán, por lo que podrá jugar
sus partidos en la capital en vez de en el campo Felix Bollaert,
estadio del Lens, considerado como la otra opción.
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