Adrián R. Huber|MONTREAL
El finlandés Kimi Raikkonen (McLaren Mercedes) ganó ayer el Gran Premio de Canadá y se confirmó como principal rival, en la lucha por el Mundial, del español Fernando Alonso (Renault), que tuvo que abandonar en la vuelta 39, cuando lideraba la carrera.

Alonso sufrió la mala suerte que acompañó a Raikkonen hace dos semanas en el Núrburgring, y se tuvo que retirar tras tocar el muro con su rueda trasera en la cuarta curva de la trigésima novena vuelta al circuito de Montreal, donde el finlandés logró el tercer triunfo del año, por delante de los dos pilotos de Ferrari, el alemán Michael Schumacher y el brasileño Rubens Barrichello, que firmó una sensacional remontada que le llevó del último puesto de la formación de salida al tercer puesto final.

Los dos Renault se colocaron en cabeza, por delante de Button y de los dos McLaren de Montoya y Raikkonen, con Schumacher -que tuvo una mala salida, en la que tapó al asturiano- en el sexto puesto. Los pilotos de la escudería de Flavio Briatore comenzaron marcando las vueltas rápidas de la carrera, turnándose Fisico con Alonso en la consecución de los mejor giros iniciales.

En el ecuador de la prueba, tras la vuelta 35 -un giro después de las segundas paradas de 'Schumi' y Button- Alonso encabezaba la prueba con 1,2 segundos de ventaja sobre Montoya y 6,1 sobre Raikkonen, con el inglés de BAR-Honda a 22,9 y eKaiser, en quinta posición, a más de medio minuto. Tras golpear el muro con la rueda trasera derecha, en la trigésimo novena vuelta, Alonso tuvo que ceder el liderato a Montoya poco antes de abandonar, por primera vez en una temporada en la que ha ganado la mitad de las carreras y en la que sólo había dejado de subir al podio en una ocasión: en Mónaco, donde fue cuarto.