Toni Ramón, presidente de la Sociedad Deportiva Portmany, realizó ayer un balance de la temporada, que según él fue bastante negativa. «Lo único positivo es que nadie ha caído lesionado de gravedad, porque deportivamente, peor no podía ir. La gente dice que los chicos han jugado muy bien, pero cuando tienen que marcar, tienen miedo o no sé qué pasa que al final hemos descendido», comentó.

El máximo mandatario de la entidad de Sant Antoni destacó que el culpable de la pérdida de la categoría fue él, como ya dijo el día que su equipo bajó a Preferente. Uno de los motivos en los que ha fallado es en la gestión tanto deportiva como económica, ya que el hecho de que el presupuesto de la entidad fuese muy ajustado para la Tercera División provocó que optaran por los jugadores de la casa. «He optado mucho por la cantera porque históricamente nos ha ido muy bien, pero se ve que no se puede lograr la permanencia con los chavales de aquí, sino que tienes que fichar gente de fuera. La economía del club no nos permitía incorporar jugadores foráneos porque teníamos que buscarles piso, trabajo, sueldo y se iban a precios muy altos. Así que optamos por contar con gente de la casa para intentar salvar el primer año y el segundo hacer el esfuerzo, pero nos ha salido mal», argumentó.