Los jugadores azulgrana, no obstante, se han decantado por una
muestra de euforia más moderada que la que ha rodeado al entorno
del club, y los reclamos de prudencia se han producido
constantemente, especialmente por parte del capitán, Carles
Puyol.
El Barcelona dispondrá en el estadio levantinista de la primera
oportunidad para alzarse con el título de Liga, objetivo que podrá
alcanzar de tres formas: si el Madrid pierde su partido contra el
Sevilla, si el Barça gana el suyo contra el Levante o si
madridistas y barcelonistas consiguen el mismo resultados.
La semana pasada, el triunfo previo del Madrid contra el Racing
(5-0) invalidó la opción de que el Barça dispusiera de una
oportunidad para alcanzar el título ante el choque frente al
Valencia (0-2), opción que por primera vez se le presentará hoy en
la capital del Turia. El Barcelona estará apoyado por algo más de
11.000 aficionados, después de las intensas negociaciones que la
entidad catalana concretó con la levantina para dar cabida al
máximo de barcelonistas en el estadio del Levante. Además, el Barça
desplazará a todos sus jugadores a Valencia y a la mayoría de
directivos. Para el encuentro de hoy, Rijkaard no podrá contar con
el brasileño Juliano Belletti, que cumplirá un partido de
sanción.
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