Chelsea 0
Liverpool 0

CHELSEA: Cech; Johnson, Terry, Carvalho, Gallas; Tiago, Makelele, Lampard; Cole, Drogba, Gudjohnsen.
Cambios: Kezman por Cole, Robben por Tiago.

LIVERPOOL: Dudek; Finnan, Carragher, Hyypia, Traore; Luis García, Biscan, Xabi Alonso, Riise; Gerrard; Baros.
Cambios: Cisse por Baros, Kewell por Biscan y Smicer por Luis García.

Arbitro: Alain Sars (Francia). Amonestó a los locales Cole (m.57), Kezman (m.78) y a los visitantes Biscan (m.56) y Xabi Alonso (m.88).

Incidencias: Partido de ida de las semifinales de la Liga de Campeones disputado en Stamford Bridge ante 40.497 espectadores. Xabi Alonso se pierde el encuentro de vuelta por acumulación de amonestaciones.

Efe|LONDRES

El Liverpool de Rafa Benítez sacó un empate sin goles del campo del Chelsea, poco lucido, pero esperanzador para un equipo que había perdido todos sus enfrentamientos ante su rival esta temporada y que, sin poder rematador, puso su mayor interés en mantener su portería imbatida.

Después de tres derrotas (dos en Liga y otra en la final de la Copa de la Liga), el Liverpool se sintió aliviado por lograr el empate que buscó durante gran parte del encuentro, pero la igualada no le asegura un cómodo partido de vuelta, en el que no contará con su creador de juego, el español Xabi Alonso, por acumulación de amonestaciones.

Como se esperaba, del duelo entre Benítez y Mourinho, los técnicos vencedores en Europa el pasado año, salió un partido muy táctico, con dos rivales que se conocen a la perfección y vivieron toda la primera mitad pendientes de no perder su dibujo, de no dejarse sorprender.

En la primera semifinal totalmente inglesa de la historia de la Liga de Campeones, no hubo más que seis jugadores seleccionables por los «pross», entre ambos conjuntos, y poco del estilo que se le asocia. Nada del juego en un área u otra en todo momento, sino interés por controlar el balón.

Lo tuvo más el Liverpool en la primera mitad, pero con menos peligro, porque el Chelsea es un equipo paciente, que sabe esperar su oportunidad y ésta suele llegar en un momento u otro.

Baros en punta

Con el checo Milan Baros como único delantero y Steven Gerrard como segundo punta, el equipo de Benítez volcó el juego por la izquierda, pero cada centro del noruego John Arne Riise no encontró rematador.

Aun así, creó un par de ocasiones, pero Riise no encontró puerta con la derecha, en el minuto 18, y el meta checo Petr Cech sacó un buen remate de cabeza de su compatriota Baros, veinte minutos después.

El Chelsea, no obstante, tuvo más claro cómo llegar a la meta rival y descubrió con más frecuencia los nervios de la defensa del equipo de Benítez.

Pudo adelantarse en una jugada de Didier Drogba, que el delantero marfileño no supo culminar (m.13) y, sobre todo, en un increíble balón que bajó con la cabeza Joe Cole y el mediocampista inglés Frank Lampard envió por encima del larguero, desde el borde del área pequeña (m.22).

Mejoró el equipo de Mourinho, tras el descanso, o, quizá, se volvió demasiado temeroso el de Benítez, que dio un par de pasos atrás y se encontró con el balón en su campo en todo momento.

Desaparecido Baros, descolocado Gerrard y con Xabi Alonso más pendiente de recuperar el balón que de distribuirlo, el Liverpool estuvo a merced del Chelsea en todo el segundo tiempo, sostenido en la mayoría de las ocasiones por la buena actuación de sus centrales.

Mourinho quiso abrir el campo con la entrada del holandés Arjen Robben, primero, y buscó más remate con el serbio Mateja Kezman, veinte minutos después, mientras que Benítez cambió de atacante sin variar el esquema; Cissé por Baros.

Pasó apuros el Liverpool, pero Benítez se salió con la suya, porque su equipo aguantó la carga final del líder inglés y se llevó para Anfield Road un empate, que no es tranquilizador, pero que le sirve para romper la racha de derrotas ante su rival, para que sus propios jugadores crean en que están a un paso de la final.