El Gasifred sumó ante el Alella Marfil el segundo tropiezo del campeonato de liga y tendrá que esperar al menos quince días más para celebrar el ascenso a División de Plata. Fotos: ALFAQUI

Un último minuto de verdadera pesadilla condenó al Arzuaga Gasifred, que sufrió un inesperado tropiezo que aplaza las celebraciones del ascenso hasta el próximo encuentro en casa. La euforia vivida durante la semana, pese a los avisos de Jandro, quizá un exceso de confianza, la actuación extraordinaria del portero del Alella David, la motivación de los locales, agobiados por el descenso, un error incomprensible en defensa en el último instante... Una inesperada serie de circunstancias se dieron cita sobre un Gasifred que fue superior, pero que al final perdió su segundo encuentro de la temporada, como si una maldición siguiera cerniéndose sobre el ascenso de los ibicencos. Toda una sorpresa.

El planteamiento en el primer periodo quedó claro, con más dominio de posesión para el Gasifred ante un Alella que planteó el encuentro a la contra, esperando en defensa, con una sólida estrategia, y velocidad en las contras. Roberto era el jugador más activo del Gasifred, con tres ocasiones claras en los primeros seis minutos de encuentro resueltas por el otro gran protagonista del encuentro, el meta David. La habitual salida en tromba del conjunto ibicienco, superior en técnica, física y fundamentos de juego a su rival, no obtuvo la recompensa en el marcador ante las enormes actuaciones del cancerbero del equipo del Maresme, muy inspirado en todo el partido.

El Alella Marfil se jugaba mucho en el envite, y su juego fue mejor al de anteriores encuentros, el 17-1 de la ida sin ir más lejos. Los locales creaban peligro por la banda izquierda a través de Ramsés, quien ya antes del primer tanto dispuso de dos buenas oportunidades para inaugurar el marcador. El uno a cero, la sorpresa en el luminoso del Alejandro Vera, llegó gracias a un chut raso, endiablado en su colocación, obra de Piru, por la izquierda y que sorprendió al meta Iván.

La buena noticia, la confirmación al juego superior de los de Jandro, llegó tarde, en el minuto 16, cuando en una falta directa, Óscar materializaba el empate a uno. Parecía que la lógica empezaba a imponerse al fin, pero en la siguiente jugada la respuesta del Alella resultó contundente. Sabaté marcó por la escuadra el dos a uno, en una jugada donde Clayton reclamó una falta anterior en la acción, y así lo pareció, pero los colegiados se inhibieron.

Hasta el final del primer periodo, de nuevo estelar David en un disparo de Lucas con marchamo de empate a dos. Y así se llegó al intermedio con la desagradable sorpresa de ver al equipo ibicenco por debajo en el marcador. No era lo esperado, pero el recital de David impedía que la fiesta del ascenso empezara a tomar forma.

La segunda parte se inició con idénticos planteamientos. Gasifred se lanzó a por el encuentro, dispuesto a borrar cualquier atisbo de sorpresa, mientras los locales fiaban su suerte en el contragolpe. Y la suerte apareció en los últimos minutos a favor del conjunto de casa. El Alella logró el 4-4 a falta de dos minutos para el final y, aunque Roberto, el mejor de los ibicencos, volvió a adelantar al Gasifred. Sin embargo, en un último minuto aciago, Jorquera y Ramsés dieron la vuelta al encuentro.