CB PUIG D'EN VALLS: Morales (23), Temnik (4), Novo (7), Dijon (4) y Ujvari (19) -cinco inicial- Laaksonen (-), Anabel Jiménez (5) e Iria Villar (3).
EXTRUGASA V.AROSA: Gómez S. (2), Boonen (11), De Mondt (13), Mandache(8) y Cooker (27) -cinco inicial- Gómez R. (2), Herrera (7) y Gilabert (1).
Parciales: 12-18; 11-15; 16-19; y 26-19.
Àrbitros: Soto y Zafra. Excluyeron por cinco faltas a Jiménez y Temnik, del PDV.
Incidencias: Pabellón Municipal de Santa Eulària. 500 espectadores presenciaron el encuentro.
Gustavo López
Mucho tendrá que mejorar en ataque el Puig d'en Valls si quiere vencer los encuentros en la Liga Femenina. El estreno en el pabellón de Santa Eulària fue nefasto en la ofensiva pitiusa, que jugó a impulsos, con más corazón que cabeza, con una buena defensa pero sin un patrón de juego definido. Dos derrotas en sendos encuentros no invitan, ni mucho menos, al optimismo. Y el sábado espera el Celta en Vigo.
A excepción de los cinco primeros minutos de partido en los que el conjunto de Jordi Fernández dominó en el electrónico y llegó a tener cinco puntos de renta, el resto del encuentro fue de color visitante, que poco a poco y con distintas variantes en ataque y defensa sobrepasó a su rival, amén de que el PDV se estrelló contra su propia impotencia anotadora.
Tras el 9-4 inicial que realizó el equipo local las opciones de victoria estaban intactas, hasta que el conjunto gallego volteó el marcador con un parcial de 0-9 en tan solo tres minutos (9-13). La aportación de De Mondt y de Boonen para el Extrugasa fueron una losa para el equipo ibicenco, que arrojaba casta con Arantxa Novo y alguna acción puntual de Silvia Morales.
En el segundo cuarto las diferencias para el cuadro de Vilagarcía de Arousa fueron in crescendo a medida que caían los minutos, porque el atasco de cara al aro de las de Fernández también subía como la espuma. Una canasta de Arantxa Novo, otra de Temnik, otra de Dijon, y dos canastas y un triple de Silvia fueron el bagaje con el que el PDV se fue al vestuario al descanso (23-33).
En la reanudación, el conjunto pitiuso comenzó colocándose en una zona 2-3 para intentar sorprender a su rival, pero el intento fue en vano. Si en los dos cuartos anteriores De Mondt y Booner perforaron el aro de las locales, en el tercer y último periodos fue la ex jugadora de la WNBA Monique Cooker la que les acribilló a canastas de todo tipo y factura. Quince puntos en el tercer cuarto y ocho en el que cerraba el partido dejaron atrás los otros cuatro que consiguió en la primera parte.
El dato más alarmante es que hasta el minuto 25 de partido Esther Ujvari, que debe ser un pilar fundamental en el ataque del PDV, sólo había anotado un tiro libre. En el minuto citado anotó su primer triple, en lo que sería su festival particular cuando el partido estaba roto. Hasta dieciocho puntos tuvo de renta el equipo lucense (33-51 en el minuto 27). En un arrebato de casta el cuadro rojillo realizó un 6-0 de parcial que dejó el marcador en 39-51 a falta del último periodo.
En el cuarto definitivo, el quinteto local jugó sin orden ni concierto, alentado por las canastas de Ujvari y Silvia Morales, que maquillaron un resultado que en ningún momento se veía susceptible de cambio.
Jordi Fernández, técnico del Puig d'en Valls se mostró «enfadado» por el mal partido de sus jugadoras y realizó el siguiente análisis. «Hemos tenido los dos primeros cuartos jugando mal y los otros dos jugando a lo que nos saliera. Sólo con garra e intención y sin ningún método no vamos a ninguna parte», argumentó.
El entrenador de las ibicencas también lamentó los fallos bajo del aro y se sinceró. «Creo que nos han puesto en la tierra y hay que pasar página», comentó.
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