Los cuatro minutos de gloria que tuvo Marcos García con el Villarreal fueron muy especiales para su familia, y sobre todo, para su padre. Juan García se mostró ayer «muy orgulloso y muy ilusionado», a la vez que añadió que «como padre es lo mejor que me podía pasar».

El jugador de Sant Antoni tocó tres o cuatro balones e incluso tuvo la oportunidad de meter un gol . «Si llega a marcar, no sé lo que me pasa», resaltó el progenitor del futbolista ibicenco.

Juan García reconoce que a Marcos todavía le queda mucho camino por recorrer y sus consejos siempre van en la misma dirección: «Que no se lo crea, que siga hacia adelante si es lo que le gusta, que sea humilde y que ponga mucho empeño», explicó.

El padre de 'Marquitos' también está interesado en que acabe los estudios, «sobre todo el Bachiller», dijo, aunque ahora está repitiendo curso por los numerosos viajes que tuvo el año pasado con la selección.

Lo que sí que tiene claro el ex jugador del Portmany es una cosa: «Papá, me gustaría ser futbolista de Primera, me dijo una vez», aseveró Juan García, quien agregó que de vez en cuando le pregunta sobre la situación del Portmany. «Está informado de todo», sentenció.