Todavía no hay fumata blanca. La nueva junta gestora de la Sociedad
Deportiva Eivissa y los anteriores rectores del club, con Mariano
Riera a la cabeza, se reunieron ayer para intentar salvar al club.
La situación es tan extrema que, según Constantino Larroda, «el
Eivissa, el jueves a las 10 de la noche, estaba desaparecido».
Todos tienen un remedio para los males del club y en eso la opinión
es unánima dentro del club: «Mariano Riera debe seguir».
«En estos momentos, soy ex presidente del Eivissa», responde
Mariano Riera cuando se le pregunta si va a recapacitar y seguir en
el club. «Hace dos meses que digo que me voy de la entidad y parece
como si nadie me creyera. Mi objetivo ahora es ayudar a que entre
la junta gestora y entre todos encontremos una salida para el
club», añade Mariano quien, sin embargo, no quiere pronunciarse
tajantemente sobre si va a volver o no al sillón presidencial. «No
puedo contestar ahora si voy a seguir. Eso sí, estoy deseando que
salga alguien para que se haga cargo del club», dice.
Sin cabeza visible
Lo único cierto del Eivissa es que ahora mismo está descabezado. La
nueva junta gestora puede empezar a tomar decisiones en cuanto a
posibles fichajes, teniendo en cuenta que el conjunto bermellón
ahora mismo no tiene ni jugadores ni entrenador, pero nadie quiere
tomar la responsabilidad. «La junta gestora está muy preocupada,
teniendo en cuenta que el club está en una situación muy delicada.
Es aventurado decir más cosas en estos momentos, pero se están
reconsiderando muchas posturas», señala uno de los miembros de la
nueva junta.
A pesar de la situación de la entidad, que podría variar en las
próximas horas para bien o para mal, Mariano Riera reconoce que
«hoy mismo [por ayer], me han llamado unos ocho jugadores y dos
entrenadores que quieren fichar por el equipo».
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