Kluivert y Reizziger celebran el primer gol del conjunto azulgrana durante el partido disputado ayer en Chamartín.

REAL MADRID 1
BARCELONA 2

R. MADRID: Iker Casillas (*), Míchel Salgado (*), Helguera (*), Raúl Bravo (*), Roberto Carlos (*), Figo (*), Beckham (*), Cambiasso (*), Solari (**), Zidane (*) y Raúl (*).
Cambios: Guti (*) por Zidane y Núñez (-) por Solari.

FC BARCELONA: Víctor Valdés (**), Reiziger (*), Puyol (**), Oleguer (**), Van Bronckhorst (*), Xavi (*), Cocu (*), Davids (**), Overmars (*) Ronaldinho (**) y Saviola (*).
Cambios: Kluivert (**) por Saviola, Luis Enrique (*) por Overmars y Motta (-) por Puyol.

Àrbitro: Pérez Burrull (Cantabria). Mostró cartulina amarilla a Cambiasso, Solari, Helguera y a Figo, en dos ocasiones, la última en el minuto 68, por lo que fue expulsado.

Goles:
1-0, Minuto 54, Solari.
1-1, Minuto 58, Kluivert.
1-2, Minuto 85, Xavi.

Luis Villarejo|MADRID

El FC Barcelona presentó su candidatura al título con su triunfo inteligente ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, en un partido emocionante y que se decantó para el club azulgrana justo en el momento en que el portugués Luis Figo fue expulsado en el minuto 68.

Hasta que se marchó al vestuario Figo, mandó el Real Madrid. Y sin el portugués, con un Real Madrid mermado físicamente, el equipo de Frank Rijkaard se vino arriba con Ronaldinho liberado, jugando a sus anchas de enganche y buscando la verticalidad de Kluivert.

El clásico no defraudó a nadie. El Real Madrid, como ya hiciera la semana pasada ante el Atlético de Madrid, tiró de casta y de un gasto de energía descomunal. Los últimos diez minutos del primer tramo fueron lo mejor del grupo de Queiroz, con un desgaste acompañado de un buen puñado de ocasiones de gol.

Un paradón de Víctor Valdés a Raúl, sacando a bocajarro un balón de gol claro, un posterior pelotazo de Roberto Carlos que sacó Puyol con el rostro en la línea de gol, y un gol fantasma de Figo, que acabó sacando el guardameta azulgrana con una mano prodigiosa, pudieron dar al Madrid oxígeno antes del descanso.

El Barcelona comenzó bien. Manejando el control del balón, abriendo de forma inteligente a la derecha hacia Overmars, pero sin pegada arriba. Y es que Ronaldinho, el tipo más esperado en el Bernabéu, el futbolista al que se le miraba con lupa, anduvo desaparecido, abandonado en la banda izquierda.

Cambiasso fue un auténtico fuelle que intimidó a Cocu, a Xavi y que dejó a Davids pelear con Beckham, en un duelo de gran calado futbolístico. Antes de llegar al último cuarto de hora previo al descanso, Ronaldinho, a los 28 minutos, pegó un latigazo a Iker que sacó el guardameta madridista.

El segundo tiempo comenzó también con el Madrid agobiando. Con Víctor Valdés enorme, sacando ya a los 48 minutos un misil de Roberto Carlos. Y a los 53 un balón increíble a Zidane en el uno contra uno.

Parecía que Víctor Valdés era un muro infranqueable cuando Solari llevó al marcador la ventaja que merecía el Real Madrid. Frank Rijkaard reaccionó de inmediato con el tanto de Solari. Sacó a Luis Enrique para llevar veneno al portal de Iker. Casualidad o no, lo cierto es que de inmediato y tras un error de entendimiento entre la defensa blanca, el Barcelona marcó el empate tras una contra que culminó Kluivert.

Demasiado premio para un Barcelona que estaba en ese instante fuera del partido. A los 68 minutos se produjo una acción clave. Figo fue expulsado por doble amarilla tras una entrada a Puyol. A raíz de ese instante cambió el guión. No le sobra físico al Madrid para encima jugar con diez, aunque ya se está acostumbrando el Madrid a jugar con diez. Perdió a Pavón frente al Atlético. Y ayer jugó sin Figo muchos minutos en inferioridad; sin tanta suerte.

Con Kluivert el Barcelona amedrentó más a su rival. Saviola estuvo inédito y Kluivert dio otro aire a su equipo. En diez minutos, Kluivert cambió el mapa del Barcelona con Ronaldinho resucitado. Cuando dejó la banda y se echó al centro a distribuir balones al hueco hacia Kluivert, hizo mucho daño.

Los últimos minutos fueron de ida y vuelta. Con mejor suerte para el Barcelona que se encontró con un tanto de Xavi, que deja abierta la Liga y con el Barcelona en condiciones de afrontar el meritorio reto de aspirar al título.
LO MEJOR: Los goles
LO PEOR: La expulsión de Figo