La Federación Española de Automovilismo introducirá nuevos cambios dentro de la reglamentación en las carreras del calendario nacional que afectará a las pruebas de montaña para la temporada 2004. El Congreso de Oficiales congregará a los diferentes organizadores que se reunirán el próximo 22 de febrero en Madrid para aprobar esta nueva reestructuración. La tradicional Pujada a sa Cala de Sant Vicent, que será este año la última prueba puntuable para el campeonato de España de montaña, verá por primera vez desde que se creó esta competición un nuevo formato de competición y sufrirá un cambio de imagen.

La carrera ibicenca, que tendrá lugar los días 16 y 17 de octubre, se correrá en dos jornadas. En cada una de ellas, los pilotos disputarán una tanda de entrenamientos y una manga de carrera. Ésto llevaría a que los coches participantes tendrían una doble puntuación repartida entre las dos carreras que se celebraría en cada una de las jornadas.

De este modo, las ocho pruebas del nacional de montaña previstas para esta temporada tendrán un global de dieciséis puntuaciones, en vez de las ocho con que se solía puntuar.

Cabe recordar que el formato tipo en estas carreras del calendario nacional con el que siempre se ha contado han sido, en primer lugar, una primera jornada donde los coches realizaban dos mangas de entrenamiento, mientras que en la segunda se celebraba una tercera ronda de entrenos y dos carreras oficiales.

Esta reforma en la reglamentación puede suponer un nuevo giro en la Pujada a sa Cala de Sant Vicent.

Estos cambios pueden suponer muchas ventajas e inconvenientes para los pilotos a la hora de plantear las carreras. Como aspecto positivo, cabe destacar que los participantes podrán tener la opción de puntuar en cada una de las dos jornadas, aunque como punto negativo sería la corta puesta a punto que tendrán los pilotos debido a la reducción de entrenamientos.