Efe|VITORIA
El ciclista Joseba Beloki, del equipo ONCE Eroski, confirmó ayer que la actual temporada «está totalmente terminada» para él, por lo que no participará en la Vuelta Ciclista a España, y se mostró «animado» después de la operación.

Beloki tuvo que abandonar el pasado lunes el Tour tras sufrir una caída que le produjo tres fracturas, en la cadera, el codo y la muñeca, cuando iba segundo en la general. Fue operado el miércoles en Vitoria por el traumatólogo Mikel Sánchez. En una comparecencia de prensa en la clínica USP La Esperanza de Vitoria, donde fue operado, el ciclista aseguró que la actual temporada está «totalmente terminada» para él y mostró su intención de «recuperarse bien». «Me he llevado un palo grande, no sólo físicamente sino también psíquicamente», señaló.

El corredor tachó de «desgraciada» la caída que sufrió durante la novena etapa del Tour y añadió que la operación a la que ha sido sometido «ha salido bien».

Aún así, recordó que en la presente edición del Tour vivió los días «en los que mejor me encontraba en la bici y en los que mejor me estaban saliendo las cosas», pero agregó que «al final no ha podido ser, y ya está». Por ello, afirmó que «es hora» de pensar en la próxima temporada y apuntó que, este año, «he dejado ver que estaba siendo el Joseba Beloki atacante que había prometido».

Con el brazo derecho escayolado, Beloki respondió a los periodistas que el próximo año cuando vuelva a subirse a una bici podría ser «otro ciclista», aunque reconoció que «ni sé lo que va a pasar» en la próxima temporada.

El ciclista indicó que al sufrir una caída de estas características «lo primero que tienes son ganas de montarte en la bici», aunque explicó que tras el accidente primero pensó que tenía rota la pelvis «porque no podía separar las piernas».

«Luego, cuando pude ponerme en pie vi que aquello iba a terminar, (pensé) que solamente había sido un golpe y una pérdida de tiempo», aseguró, pero al final, al no poder montarse en la bici «se me vino todo abajo».

Por otro lado, agradeció el apoyo recibido por parte de sus seguidores, así como por parte del líder Lance Armstrong, que telefoneó al médico del equipo ONCE para interesarse por el estado del ciclista español.

Asimismo también manifestó que pensaba que en la etapa contrarreloj que tuvo lugar en la tarde de ayer el maillot amarillo Lance Armstrong podría «marcar diferencias» con respecto a sus compañeros.