Efe MADRID
Adecco Estudiantes consiguió en Badalona la tercera victoria de la temporada (70-81) y se mantiene invicto en la competición gracias al rebote ofensivo (21) y, sobre todo, al festival de triples de Brewer (6) en el último periodo, en un encuentro que el DKV Joventut dominó durante los primeros 30 minutos.

El partido comenzó con un gran despliegue defensivo por parte de ambos equipos. La diferencia, en el primer cuarto, fueron los triples: mientras el Joventut convertía tres canastas de tres, el Estudiantes fallaba los seis tiros que intentó. Gracias a este apartado los locales llegaron con ventaja de 9 puntos al final del primer cuarto (23-14).

El segundo cuarto comenzó con dominio local y el Joventut llegó a tener una ventaja máxima de 14 puntos (30-16) a falta de 6 minutos para el descanso. En ese momento, el alero estudiantil Nicola Loncar cogió la responsabilidad del ataque de su equipo y él sólo consiguió endosar un parcial de 0-10 (incluidos dos triples).

Con 30-26 apareció en la cancha Juan Alberto Espil, duda durante toda la semana por problemas en un tobillo, con el objetivo de secar a Loncar. El Estudiantes volvió a los problemas en ataque, de lo que se aprovechó el equipo de Manel Comas que, gracias a otro parcial de 10-2, llegó al descanso con ventaja de 12 (40-28).

Apoyado en una gran defensa y muy superior en el rebote ofensivo, el conjunto madrileño fue poco a poco limando la diferencia frente un Joventut colapsado en ataque. El Estudiantes logró de esta manera llega al último periodo con el marcador ajustado (54-53).

En el momento decisivo apareció Corey Brewer. El ex base de Caja San Fernando se responsabilizó del ataque estudiantil y con 6/6 en triples en este periodo hundió a un Joventut cada vez más atenazado y que acabó perdiendo el partido por un claro 70-81.

Javier Imbroda y Gustavo Aranzana, dos técnicos con una misma filosofía del baloncesto y una amistad compartida, pero con un resultado radicalmente opuesto en el bolsillo por culpa de un Real Madrid aciago que enseñó una cara tenebrosa y acabó vapuleado por el Caja San Fernando justo cuando el camino le enseña los dientes del Virtus Bolonia en la Euroliga y del Tau en la ACB.

Los blancos, además, deben dar gracias por los cuatro triples consecutivos que el francés Alain Digbeu colocó en los dos últimos minutos para atemperar un marcador que, en muchas fases, resultó sonrojante. El Caja San Fernando, con un Francisco Elson exhultante -catorce puntos y quince rebotes- dobló al Madrid en su propia casa en más de una ocasión y, en su mejor momento, disfrutó de veintisiete puntos de renta (29-56 m.29).

El Barcelona, ante un rival como el Casademont Girona que intenta mantener los máximos minutos posible a su quinteto titular íntegramente extranjero, exhibió el abanico de posibilidades que le ofrece su plantilla para hacerse con un cómodo triunfo. Gregor Fucka, una de esas figuras azulgranas, metió a su equipo muy pronto en un partido en el cual no tuvieron muchos problemas.