Mario Pestano, que impresionó en la calificación de disco con su
primer tiro, de 65'27, el mejor de todos, tendrá que dominar los
nervios, que le traicionaron en los Mundiales de Edmonton, si
pretende luchar por las medallas en la capital bávara. Por su
parte, Raúl Fernández y Yago Lamela, campeón y subcampeón de Europa
de longitud bajo techo en Viena, respectivamente, intentarán
confirmar al aire libre su recuperación. Lamela fue el único que
pasó de ocho metros en la calificación (8'03) y dice estar para
acercarse a su mejor marca (8'56). El sevillano tampoco pasó apuros
(7'87) y está llamado a meterse entre los mejores si su concurso no
es malo.
Los madrileños Alberto García y Jesús España y el aragonés
Roberto García competirán con esperanzas de medalla en la final de
5.000, que cerrará el programa individual. El fondo español gana
peso a nivel continental, y esta última final es una oportunidad
inmejorable para reconfirmarlo. Cuarenta minutos antes habrán
participado en la final de 1.500 metros femeninos Natalia
Rodríguez, Nuria Fernández e Iris Fuentes-Pila, intentando reeditar
los éxitos cosechados en la prueba masculina.
El secretario de Estado para el Deporte, Juan Antonio Gómez
Angulo, declaró que en Múnich se están «presenciando los mejores
Campeonatos de Europas de atletismo para España en toda la
historia». Gómez Angulo se mostró «muy satisfecho» y anunció que
esta tarde ha recibido las felicitaciones, extensibles a todo el
equipo español, del presidente del Gobierno, José María Aznar, de
la ministra de Educación, Cultura y Deporte, Pilar del Castillo, y
del presidente de Castilla y León, Vicente Herrera.
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