Éxtasis, locura y todo lo que ustedes se puedan imaginar fue lo que se vivió ayer en Eivissa con la 'torcida' brasileña que celebró por todo lo alto el triunfo de su selección en la final del Campeonato del Mundo ante Alemania por 2-0. Multitud de seguidores cariocas se congregaron en la zona de Playa d'en Bossa para presenciar la conquista del título mundial de Brasil.

El ambiente fue de auténtica fiesta desde el inicio de partido hasta que el colegiado Pier Luigi Collina pitó el final. Los dos goles de Ronaldo desataron la pasión entre los hinchas brasileños que festejaron a ritmo de samba el triunfo de su selección.

La mejor parte llegó después del encuentro ya que los seguidores brasileños invadieron las calles de los diferentes puntos de Eivissa e hicieron llegar su fiesta y alegría a todos los ciudadanos ibicencos que se contagiaron de la magia y el sabor de la samba. Mejor colofón imposible.