El 'ciclón' pitiuso arrasa en Alaró

Tomeu Pollo / Àrea 11 X ALARÓ
Al fin rompió su mala racha de resultados fuera de casa el Gasifred Atlético, con un contundente triunfo en la cancha del Alaró. Los de Eivissa se sobrepusieron a todos los problemas derivados del viaje (hace un par de días todas las apuestas daban el partido por suspendido) y pasaron como un ciclón -vaya metáfora- por el municipal de Alaró, donde superaron a los locales en toda regla. La primera mitad resultó perfecta para los intereses del Gasifred. Los visitantes salieron con espíritu dominador y parecía que el Alaró era el de fuera. Con un fútbol sala rápido, con combinaciones y triangulaciones, los pupilos de Ruétalo dieron un baño total a un quintento mallorquín que nunca encontró su sitio sobre la pista. Al recital ibicenco contribuyó decisivamente el estado de gracia de Romerito. Un constante incordio para la defensa local y artífice de la goleada. No tardó el Gasifred en adquirir una merecida ventaja, cuando Romerito abrió el marcador tras una veloz combinación de los suyos.

El partido no había llegado al minuto cinco, y todo apuntaba hacia noticias alegres para los pitiusos pues los locales no daban señales de vida y perdían el esférico con suma facilidad. En un minuto eléctrico del Gasifred, Romerito añadió dos muescas más en su cinturón colocando el 0-3 antes del octavo minuto de partido. Nada más sacar de centro tras el segundo gol, el FS Alaró perdió la posesión y en la jugada siguiente Romerito certificaba la enorme superioridad de un Gasifred que presionaba y movía el esférico siempre con sentido ofensivo, abriendo la cancha merced a su técnica, mucho más depurada. Los locales, con muchos errores tanto en ataque como en defensa, fueron incapaces de dar sensación de peligro y Seco redondeó el poker goleador del Gasifred antes del intermedio. De salida, en el segundo periodo los locales echaron el resto y pusieron en algunos problemas el portal defendido por Poli hasta que Gori hizo el tanto del honor. El gol espoleó a un Gasifred dormido tras el intermedio, y Monti respondió con el quinto gol. Después, poca historia más.