Efe PHILLIP ISLAND (AUSTRALIA)
El italiano Valentino Rossi hizo historia al convertirse en el campeón del mundo más joven que consigue los tres títulos, 125, 250 y 500 c.c. y lo hizo a lo gran campeón, con victoria en el GP de Australia de 500 c.c. que se disputó en el circuito de Phillip Island, mientras que el japonés Daijiro Katoh y el sanmarinense Manuel Poggiali cada vez están más cerca del objetivo en sus cilindradas.

A Rossi le bastaba con acabar entre los ocho primeros para ser campeón del mundo, siempre y cuando su máximo rival, su compatriota Max Biaggi (Yamaha), ganase la carrera, pero el joven campeón de Urbino quería refrendar su hegemonía con una victoria y luchó, a veces con demasiado riesgo, por ganar la misma.

A Carlos Checa la mecánica le volvió a resultar esquiva y concluyó fuera de los puntos, mientras que Alex Crivillé estuvo muy mal. Salió mal, intentó remontar y al final tuvo que dar por válida una undécima posición.

El japonés Daijiro Katoh (Honda) enmendó con una nueva victoria su caída de hace una semana al ganar la prueba de 250 en la que el español «Fonsi» Nieto (Aprilia) luchó en algunos momentos por el podio. «Fonsi» asestó un «hachazo» impresionante a los japoneses Katoh y Tetsuya Harada (Aprilia) y mantuvo el liderato de la carrera durante más de dos vueltas.

Otro japonés, Youichi Ui (Derbi) fue claro ganador de la prueba de 125 c.c., pero aunque se acerca a los hombres de cabeza en la lucha por el título, el protagonismo lo asumieron el sanmarinense Manuel Poggiali (Gilera), actual líder y el español Antonio «Toni» Elías (Honda), quien luchó durante toda la carrera con éste pero hubo de claudicar ante el mayor potencial de su oponente.