Daniel Muñoz representará a España en el mundial de kickboxing de Austria

Muñoz, quien reconoce que no acude con su mejor nivel físico, señaló que su objetivo es alcanzar el podio final aunque reconoció la finalidad de esta empresa. «Es muy difícil llegar arriba porque en una semana hay que realizar 4 ó 5 combates y cada combate desgasta mucho; además la suerte influye mucho en el resultado final y siempre hay posibilidad de lesiones. Además, puede pasar que el rival más fuerte llegue a la final muy débil por desgaste o que el rival débil en principio llegue fuerte porque los combates han sido sencillos», apuntó.

Muñoz, quien arrastra los problemas derivados de tener que luchar con licencia de la federación valenciana y se haya a la espera de los documentos que acrediten el club que ha puesto en marcha para poder luchar por Balears, indicó también que los arbitrajes condicionan.

En este sentido, dijo que la subjetividad es un factor inevitable. «Cada golpe tiene una puntuación diferente y es difícil cuantificarlos ya que los combates no tienen interrupciones y se complican sobre todo si son igualados. Es mejor llegar al combate más fuerte y ser muy superior, marcar la diferencia porque cuando los combates son igualados entran en consideración otros factores como la disposición al combate y la técnica».

Muñoz asegura que no gana el más fuerte, a veces y en función del rival, gana el más ágil. «Busco la puntuación, muchos golpes aunque sean más flojos, sobre todo cuando me toca gente de menor altura, con más masa muscular y más fuertes», aseguró. En cuanto a los favoritos al triunfo final, Muñoz dijo que Rusia es uno de los países más potentes en cuanto al nivel de su selección que cuenta con gente más preparada. En cambio, hasta este fin de semana y por las limitaciones de presupuesto de la federación española de kickboxing, el púgil ibicenco desconocía si podría acudir a Austria seleccionado.

«Sabía que podía ser»
En cuanto a si a priori esperaba ser seleccionado, Muñoz indicó que viendo el nivel de los que acudieron a la concentración a Madrid «sabia que tenía posibilidades, pero hay un sistema de puntuación en el que se tienen en cuenta los campeonatos y las concentraciones. Creo que el aspecto que más pesa en este tipo de citas es el combate».

Daniel Muñoz, como se cita anteriormente, se vio obligado a empadronarse en otra localidad para poder competir por tener problemas con las personas que actualmente dirigen la Federación Balear de Kickboxing (FBK). El ibicenco ha sido dos veces campeón de España en la modalidad de full contact. Ahora, tras obtener su título de entrenador nacional, está pendiente desde el pasado mes de febrero de disponer el permiso para poder inaugurar el club ASIKAN, en el que ya tiene preinscritos a cuatro deportistas.