Las máquinas de Excavaciones Es Vedrá trabaron ayer para demoler las gradas fantasmas. Foto: MARGA FERRER

Las gradas de la zona norte del estadio de Can Misses, campo en el que juega la Sociedad Deportiva Eivissa y cuya construcción data de cuando la SD Ibiza militaba en Segunda B, ya son historia. Desde ayer y tras los retrasos en la aprobación final en el pleno del Consell Insular del remanente del que el Ayuntamiento de Eivissa ha conseguido los 4'6 millones de pesetas que cuesta la obra menos, la empresa Excavaciones Es Vedrá derriba el esqueleto de una obra inacabada y olvidada durante una década en los cajones municipales.

La actuación tiene una duración de tres semanas, según ha informado el concejal de Deportes en el Ayuntamiento ibicenco, Roque López, quien confirmó que la redacción del proyecto de Mejora y Creación de Nuevas Instalaciones en el estadio de Can Misses se adjudicará en breve y que la fase administrativa del concurso está abierta tras la publicación del pliego de condiciones elaborado por los servicios técnicos.

El plazo para la redacción del proyecto es de tres meses, con lo que es previsible que la actuación salga a concurso a finales de este año. Con el proyecto a punto de ser una realidad, el proceso para la remodelación de Can Misses «ya no tiene marcha atrás», según indicó López, quien achacó el retraso en la puesta en marcha del proyecto a la reiterada paralización, por el voto en contra del Grupo Mixto en el pleno del Consell, de la aprobación de un remanente cuyo destino era obras en instalaciones deportivas.

La instalación de asientos más cómodos en el graderío sur ha sido el primer signo de movimiento de la anunciada remodelación del estadio, que ha sufrido el olvido de las inversiones deportivas en los últimos diez años El gobierno del Pacte Progresista anunció hace cerca de dos años (septiembre de 1999) cuál era su intención acerca de esta instalación, pero no fue hasta el pasado mes de junio en que la puesta en marcha de la idea se hizo realidad.