JOSÉ ANTONIO DIEGO (EFE)
La estadounidense Marion Jones recuperó la sonrisa después de conseguir una apurada victoria sobre la bahamesa Debbie Ferguson en la final de 200 metros de los campeonatos del mundo cuatro días después de sufrir, en la final del hectómetro, su primera derrota en cinco años. El recuerdo de su primer fracaso en 42 finales de 100 metros agarrotó las piernas de Marion Jones, que no logró despegarse, como acostumbra en sus mejores tardes, de sus adversarias en la recta final. Ferguson apretó a la norteamericana, que entró resoplando en la meta con un tiempo de 22.39 y un margen de trece centésimas.

Con el cabello repartido en 16 surcos, Marion Jones partió muy lenta (186 milésimas para dejar los tacos) y tuvo que sufrir para alcanzar la redención tras su derrota frente a la ucraniana Zhanna Pintusevich-Block. Su compatriota Kelli White consiguió el bronce con 22.56. Félix Sánchez, estudiante de Psicología en la Universidad de San Diego, logró su objetivo de dar a la República Dominicana, la patria de sus padres, la primera medalla en la historia de los campeonatos, y además de oro, al ganar la final de 400 metros vallas.

Dominicano por elección, Sánchez, de 23 años, sostuvo un cerrado esprint con el anterior campeón del mundo, el italiano Fabrizio Mori, y terminó venciendo con la mejor marca jamás conseguida en territorio canadiense, la mejor del mundo este año: 47.49 segundos. Sánchez derramó lágrimas de alegría antes de reclamar una bandera dominicana para dar, envuelto en ella, la vuelta de honor a la pista. Mori batió el récord italiano con 47.54 y el japonés Dai Tamesue obtuvo la medalla de bronce con 47.89, récord nacional.