EFE-CRACOVIA (POLONIA)
3 WISLA CRACOVIA: Sarnat, Baszczynski, Szymkowiak (Marek Zajac, m.80), Bogdan Zajac (Ibrahim, m.80), Glowacki, Kosowski, Moskal, Moskalewicz, Pater, Frankowski (Czerwiec, m.69) y Zurawski.

4 FC BARCELONA: Bonano, Gabri, Christanval, Andersson, Sergi, Xavi, Rochemback (Reiziger, 81), Luis Enrique (Roberto Trashorras, m.87), Kluivert, Rivaldo y Overmars (Cocu, m.60).

ÀRBITRO: Rune Pedersen (noruego). Mostró tarjetas amarillas a Sergi (m.37), Cocu (m.62) y Moskal (m.64).

GOLES:
1-0, min.22, Pater, al rematar de cabeza en el área pequeña.
1-1, min.30, Rivaldo, de penalti. 2-1, min.31, Pater, de cabeza. 2-2. min.33, Rivaldo, de un disparo cruzado dentro del área. 3-2, min.38, Frankowski, al aprovechar un rechace de Bonano.
3-3, min.55, Kluivert, con un disparo a la media vuelta.
3-4, min.73, Rivaldo, con un remate colocado.

INCIDENCIAS: Partido de ida de la tercera ronda preliminar de la Liga de Campeones de Europa, disputado en el Estadio del Wisla de Cracovia ante unos 10.000 espectadores. El partido de vuelta se celebrará en el Camp Nou el 21 de agosto. El Barcelona lució brazaletes negros en señal de duelo por la muerte del padre del jugador Javier Saviola, además de vestir por primera vez su nueva segunda equipación de color dorado.

El brasileño Vitor Borba Rivaldo, autor de tres goles, y el holandés Patrick Kluivert lideraron la victoria azulgrana hoy en campo del Wisla de Cracovia (3-4), en el partido de ida de la tercera ronda previa de la Liga de Campeones en el que los catalanes tuvieron que remontar por tres veces un marcador adverso. Rivaldo y Kluivert, autor del tercer gol barcelonista y que participó activamente en dos de los tres marcados por el brasileño, formaron una pareja letal en el ataque azulgrana que acabó maquillando las miserias de una defensa que volvió a hacer aguas.

El Barcelona acabó con un buen resultado, que deberá confirmar en la vuelta que se disputará el 21 de agosto en el Camp Nou, un encuentro en el que volvió a mostrar dos caras totalmente distintas, como tantas veces le sucedió en la temporada pasada. Cuando en la primera mitad el equipo catalán quiso jugar a contener, llegaron los errores defensivos y los nervios, pero cuando se decidió a lanzarse al ataque en la segunda parte, apareció el poderío ofensivo, la superioridad y el control del balón. En los minutos finales, el Barcelona se dedicó a controlar el balón para administrar su victoria.