EFE-SAO PAULO El palentino Isaac Viciosa, campeón de Europa de 5.000 metros, puso fin en el Estadio de Vallecas a un año aciago con una victoria en la San Silvestre, batiendo al esprint al keniano Robert Mudogo.

El éxito de Viciosa, 4 años después de conseguir ser primero en esta misma prueba, le sitúa en la senda victoriosa por la que caminaba hasta que hace dos años empezó su calvario de enfermedades y lesiones, que le apartaron de la escena internacional. La carrera se resolvió, como en casi todas sus ediciones, en las ultimas rampas de ascenso al estadio vallecano.

A diferencia de otras veces hoy llegaron a los dos últimos kilómetros una decena de atletas en disposición de luchar por la victoria, de ahí que Viciosa no tuviera la seguridad ni siquiera de estar en el podio hasta los últimos cien metros. Chema Martínez fue el primero que atacó, a tres kilómetros de la meta, y se alternó en cabeza con Mudogo hasta el último tramo. Viciosa, que había ido resguardado en el grupo durante toda la prueba respondió al último ataque del keniano y le dejó atrás justo en la entrada al estadio.

«Espero que esta victoria me permita volver a ser el de antes», declaró Viciosa. «En 2000 lo único bueno es que ha nacido mi hijo Vicente y quiero olvidarme de él en el aspecto deportivo», dijo. Fabián Roncero el ídolo local y vencedor en 1998 demostró no estar tan rápido como Viciosa y no pudo estar en al pelea por el podio.