La australiana de origen serbio Jelena Dokic despertó del sueño a la española Magüi Serna al vencerla ayer con contundencia por 6-3 y 6-2 en los cuartos de final de Wimbledon.

La hija del irascible Damir se impuso en sólo 67 minutos para alcanzar por primera vez en su carrera las semifinales de un torneo del Grand Slam donde se las verá contra la vencedora del encuentro entre las americanas Lindsay Davenport (2) defensora del título y Mónica Seles (6). Serna se ha embolsado 14 millones de pesetas. El servicio de Magüi, que tan buen resultado le había dado hasta ayer, con 31 saques directos (la segunda jugadora que más llevaba en el torneo), fue un arma inservible para la canaria. Serna lo perdió en seis ocasiones y por el contrario sólo aprovechó dos puntos de ruptura de los diez que dispuso. Magüi fue presa fácil de Dokic, como en el único encuentro anterior disputado entre ambas, en El Cairo el año pasado, en tierra, con 6-1 y 6-0 a su favor. Sin primeros servicios y con 38 fallos de derecha, Serna podía hacer poco.

Casi igual de rotunda fue Serena Williams para destrozar a su compatriota Lisa Raymond por 6-2 y 6-0 y alcanzar por primera vez las semifinales aquí en dos actuaciones. La menor del clan Williams fue tan contundente que tuvo tiempo de ganar, ducharse y cambiar de pista para contemplar la gran victoria de su hermana Venus ante la suiza Martina Hingis por 6-3, 4-6 y 6-4. Venus consiguió la victoria con su octavo «ace» y dio un grito de alegría que se escuchó en todo Wimbledon.