Una mujer que fue detenida el 30 de octubre de 2013 a su llegada al aeropuerto de Eivissa con 92 envoltorios de cocaína en el interior de su organismo que en total contenían 914 gramos de cocaína fue condenada ayer a una pena de tres años de cárcel. Por su parte, el hombre que le hizo el encargo recibió una condena de tres y medio.
El juicio, que se cerró con un acuerdo de conformidad entre los acusados y la Fiscalía de Eivissa, lo celebró ayer por la mañana en Palma la Sección Primera de la Audiencia Provincial. En un principio, el ministerio público reclamó una pena de seis años para él y de cinco para ella.
En 2013
El ministerio público acusa al ahora condenado de dedicarse a la venta de cocaína durante los meses de septiembre y octubre de 2013. Fue sorprendido cuando realizaba un pase a un turista en un restaurante del puerto deportivo de Marina Botafoch.
Además, los investigadores descubrieron que este acusado, junto con otra persona que por el momento no ha podido ser identificada, encargó a la ‘mula' ahora condenada que trajera cocaína a la isla.
En el registro de la casa del hombre la Policía Nacional encontró diversas cantidades de cocaína y unos 7.000 euros provenientes de la venta de sustancias estupefacientes.
1 comentario
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Madre mía, si con lo llenas que están las cárceles empiezan a meter ahora tambiém mulas, no sé dónde vamos a llegar. Al final vamos a tener que meter en los establos a las personas.