El caso más grave se registró en la medianoche del domingo al lunes en estos apartamentos de Cala de Bou.

Al menos tres turistas se precipitaron desde sus respectivos balcones entre el sábado por la noche y el lunes a primera hora, informaron ayer desde la Comandancia de la Guardia Civil de Balears. Dos de ellos resultaron heridos de carácter leve, pero el segundo sufrió daños graves y se encuentra hospitalizado en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. Se trata de un turista de nacionalidad británica y 27 años de edad, Citrine L., que se precipitó poco después de la medianoche del domingo al lunes desde el balcón de la segunda planta del edificio en que se alojaba en Cala de Bou, en el municipio de Sant Josep.

El joven cayó tan solo desde unos cinco metros de altura, pero sufrió un fuerte golpe en la cara que le fracturó la mandíbula. De la investigación de este caso se hizo cargo la Policía Judicial de la Guardia Civil.