Los ladrones destruyeron las máquinas tragaperras pero no se llevaron la recaudación
La alarma y la celeridad con la que actuó la policía evitaron daños mayores. Al menos tres ladrones intentaron desvalijar en la madrugada de ayer un conocido bar de la avenida Pedro Matutes de Platja den Bossa después de cortar con una cizalla las rejas de protección del establecimiento y abrirse paso por una de sus ventanas. Los asaltantes apenas estuvieron unos minutos dentro del inmueble pero causaron grandes desperfectos. Todo ello tras destrozar dos máquinas tragaperras y de intentar localizar la recaudación del negocio.
Los sospechoso emprendieron la huida rápidamente, abandonando la cizalla que habían empleado, después de darse cuenta de que se había activado la alarma. Instantes después, intervenían patrullas del Cuerpo Nacional de Policía. Agentes de Policía Científica llevaron a cabo luego la inspección ocular y recopilaron los primeros datos que puedan servir a la investigación.
El suceso ocurrió pasadas las dos de la madrugada. Según los datos con los que contaba el dueño del bar La Grifería, establecimiento afectado, uno de los ladrones quedó fuera vigilando mientras los otros dos operaban. La cantidad sustraída y los daños estaban siendo valorados ayer, explicó el perjudicado, persona que agradeció el interés y la rapidez con la que intervino la policía.
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