El Ministerio Público solicita una pena de dos años de prisión para una joven nigeriana de 30 años de edad, S.P., que se encuentra en situación migratoria irregular por un supuesto de robo con violencia o intimidación consistente en el robo de un teléfono móvil a un turista británico, un hecho que la acusada, presuntamente, realizó junto con otras dos mujeres.

El robo se produjo en el Passeig de ses Fonts de Sant Antoni el pasado 29 de agosto y la persona a la que sustrajeron el móvil ya se ha marchado a su país, de forma que ayer no compareció ante la juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez, una circunstancia a la que se agarra la defensa, ya que no se ha celebrado una rueda de reconocimiento en la que el británico pudiera comprobar si la mujer es una de las tres que, supuestamente, le quitaron el su teléfono. Ella, por su parte, asegura que se equivocan de persona.

Por su parte, los dos agentes de la Policía Local de Sant Antoni aseguran que el británico señaló a la joven nigeriana como una de las tres que lo asaltaron y robaron el móvil.

Añadieron los agentes que vieron el tumulto que se produjo cuando las jóvenes asaltaron al turista y que siguieron a una de ellas, que no la perdieron de vista y que era fácil reconocerla por la camiseta roja de tirantes que llevaba. Según los agentes, esa mujer es la que ellos detuvieron y ahora es juzgada. El caso quedó visto para sentencia.