La tragedia se produjo en este velero, el ´Kelbo', alquilado en Andratx y ahora amarrado en Santa Eulària. Foto: J.M.A.

Salvamento Marítimo continuó buscando durante las horas de luz del día de ayer al alemán de 66 años Peter W. sin resultados. Hoy a las diez de la mañana se cumplen 48 horas de su desaparición, por lo que ya no queda lugar para la esperanza. «Cayó al mar sin chaleco salvavidas y el agua está a 14 grados», manifestó ayer el responsable de Salvamento Marítimo en Balears, Miquel Chicón. En el velero, el «Kelbo», de unos diez metros de eslora, navegaban cuatro personas, todas de nacionalidad alemana. Según declararon los tres supervivientes ayer por la mañana a la Guardia Civil en Santa Eulària, un golpe de mar les arrojó a los cuatro al mar. Eran sobre las diez de la mañana. El más joven de los cuatro, hijo del desaparecido, consiguió por sus propios medios subir al barco, y lanzó una escalera a sus compañeros para que se agarraran a ella y así pudieran llegar hasta la borda del velero. Dos de ellos lo lograron, pero Peter W. no alcanzó la escalera.

Demasiado viento

Los tres tripulantes, que resultaron ilesos, maniobraron para buscar a su compañero y cuando consiguieron dar la vuelta ya le habían perdido de vista. El viento era demasiado fuerte y, además, falló el motor del velero, un modelo Beneteau-Oceanis 361 con bandera alemana y matrícula WHV 244, al parecer alquilado en el puerto de Andratx. Los cuatro tripulantes, tres de ellos de más de 60 años y el cuarto de unos 30 años, zarparon de este puerto mallorquín sobre las ocho de la mañana del domingo rumbo a Eivissa.

Unas dos horas después, a unas 20 millas al sur de sa Dragonera, sufrieron el golpe de viento que los arrojó al mar. Pese a estar más cerca de Mallorca que de Eivissa, fueron incapaces, debido al viento, de poner proa hacia la isla grande, una maniobra aún más complicada a causa del fallo del motor, por lo que continuaron rumbo a Santa Eulària mientras avisaban de la emergencia a Salvamento Marítimo. Dos lanchas de este servicio, un barco mercante y otro de pasajeros, así como medios aéreos, buscaron al desaparecido intensamente en esas primeras horas vitales, pero no hubo resultados.

Salvamento remolcó el velero hasta el puerto de Santa Eulària, donde permanece amarrado y por la mañana la Guardia Civil tomó declaración a los tripulantes. Ya a primera hora de la tarde los tres supervivientes tomaron un avión de regreso a Mallorca. Mientras, continuaba la búsqueda.