El responsable de la oficina en las Pitiüses de la Unión de
Consumidores Españoles (UCE), Carlos Salinas, remitirá al Instituto
Nacional de Consumo las denuncias que ha recibido en las islas en
los últimos meses relativas a estafas realizadas a través de
números que comienzan por 806.
La idea, explicó Salinas, es presentar estas denuncias para que
se actúe desde la Oficina de Telecomunicaciones del Ministerio de
Fomento contra este tipo de fraude telefónico en el que, además de
cobrar a un euro por minuto sin avisar del coste de la llamada, se
ofrece un premio inexistente. En concreto, el responsable de la UCE
en Eivissa y Formentera presentará al Instituto Nacional de Consumo
las denuncias que ha recibido en su oficina por su puesto fraude
telefónico a través del número 806 51 50 34. Al parecer, la
mecánica del fraude, que se produce desde hace ya más de un año,
siempre es la misma. El usuario recibe una llamada -en el caso de
que nadie responda dejan el mensaje en el contestador- en la que se
le avisa de que ha sido agraciado con un premio en un sorteo y de
que para saber donde hay que ir a recogerlo ser debe llamar al
número 806 51 50 34. Con el fin de no delatarse rápidamente, la
voz, en ocasiones con acento extranjero, evita pronunciar el número
«ochocientos seis» y utiliza la forma «ochenta, sesenta y
cinco...».
Los números que empiezan por 806 ocupan de nuevo titulares
destacados en la actualidad informativa a raíz de la detención del
propietario de una productora de televisión y su familia, a los que
se acusa de fraude.
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