En los comercios de La Marina se denunciaron en 2003 muchos casos de uso fraudulento de tarjeta bancaria.

La oficina de la Unión de Consumidores Españoles (UCE) en las Pitiüses ha remitido una carta a la Conselleria de Sanidad y Consumo en la que solicita que emprenda una campaña para concienciar a los comerciantes de la necesidad de solicitar el documento nacional de identidad a los clientes que paguen con tarjeta, informó ayer el portavoz de esta asociación en Eivissa, el socialista Carlos Salinas.

Esta medida, puntualizó Salinas, está destinada especialmente a los propietarios de los establecimientos de la zona del puerto de Eivissa y del barrio de La Marina, ya que, tal y como recordó ayer el portavoz de la UCE, durante la temporada turística del año pasado se detectaron en esta zona comercial numerosos casos de utilización fraudulenta de tarjetas bancarias. Es decir, tarjetas robadas cuyos propietarios no denunciaron a tiempo su desaparición y fueron utilizadas para realizar compras en estos locales.

«Que exijan el carnet de identidad cuando los clientes pagan con tarjeta, porque de esta forma tan sencilla se evita un grave problema», dijo Salinas, que recordó que quienes detectan la desaparición de una de sus tarjetas bancarias «deben llamar por teléfono a su banco cuanto antes para anularla».

Según la UCE, muchos dependientes de establecimientos comerciales no solicitan el DNI a sus clientes porque tienen órdenes expresas de no hacerlo, ya que, al parecer, esta circunstancia les podría hacer perder clientela.

Salinas explicó que este año la UCE todavía no ha recibido ninguna denuncia relativa al uso fraudulento de tarjetas bancarias pero, no obstante, es previsible, consideró el portavoz de Consumidores en Eivissa, que al igual que en años anteriores las denuncias lleguen con los turistas.

Las denuncias que recibe la UCE son remitidas a la Oficina de Consumidores que tiene el Consell Insular en Eivissa, ya que la UCE no tiene infraestructura en las islas para tramitar los expedientes de quejas. Desde esta oficina del Consell se agrupan y conducen los problemas de los consumidores.