J. M. ALONSO
El juez decano, Juan Carlos Torres, ha mostrado su satisfacción por el proceso de especialización de los juzgados de Eivissa aprobado ayer por el Consejo de Ministros, una medida que «adecúa [la organización de los juzgados pitiusos] a las nuevas legislaciones procesales que exigen mayores requisitos de rapidez, presencia del juez en toda clase de procesos civiles y penales y el aumento de la planta de los juzgados de la isla».

A partir del próximo mes de febrero, los siete juzgados mixtos de Eivissa (cuatro de primera instancia y tres de instrucción) comenzarán a especializarse y separar, progresivamente, las materias civil y penal, una tarea que, según estima el juez decano, quedará completada a lo largo de 2005, cuando los juzgados de penal ya no estudien casos civiles y viceversa.

Esta especialización, apuntó Torres, estaba siendo reclamada por la Junta de Jueces de Eivissa desde 2001 y, en los últimos meses, a raíz de el imparable aumento de juicios penales, se convirtió «un clamor».

«Era incompatible el servicio de guardia con el normal señalamiento de los juicios civiles», dijo el juez decano, que añadió que «el esquema de organización [de los juzgados de Eivissa] data de principios del siglo XX».