La Policía Local de Eivissa celebró ayer el día de su patrón, Sant
Rafel, con una misa en la Iglesia del Rosario y un lunch en el
hotel Mare Nóstrum de Platja d en Bossa. Al encuentro acudieron la
delegada del Gobierno, Marienna Sánchez-Járegui; el alcalde de
Eivissa, Xico Tarrés; y el concejal de Policía del Ayuntamiento de
Eivissa, Leopold Llombard.
Tras la misa en honor del patrón de la policía de la capital
pitiusa, el alcalde pronunció un pequeño discurso en el que alabó
la labor de la Policía Local y, después, se ocupó de la entrega de
condecoraciones: cruces al mérito policial y cruces por 25 años de
servicio en el cuerpo.
Tarrés entregó cruces a los 25 años de servicio (o más, como
ocurre en algunos de los casos) al inspector jefe Manuel Ayala,
Josefa Martín Benítez, Rafael Fernández Sánchez y Francisco
Veracruz.
Los policías locales que recibieron la cruz al mérito policial
fueron Miguel Muñoz, Antonio Cardona (Gemma Angulo recogió el
galardón en su nombre) y Julián Córdoba. Éste último agente, que se
presentó a las pasadas elecciones municipales como cabeza de cartel
por el partido Asociación Social Independiente (ASI), salvó
recientemente a un menor de morir intoxicado en un incendio en un
domicilio. El menor, nervioso por la situación, arrancó de la cara
la máscara del agente, que tuvo que ser atendido por los médicos.
Además, durante la celebración se entregaron los trofeos a los
vencedores de los torneos que la Policía Local de Eivissa ha
organizado este año. Se entregaron los premios a los ganadores de
los campeonatos de tiro, billar, fútbol y bolos.
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