Las partes presentaron sus versiones en el juzgado de instrucción número 2 de Eivissa.

Un joven ha acusado de malos tratos y vejaciones injustas a un agente de la Policía Local de Eivissa que, por su parte, asegura que el joven se negó a identificarse y forcejeó y que, por ese motivo, fue trasladado a las dependencias municipales bajo la acusación de desobediencia. Ayer se celebró el juicio, con unas dos horas de retraso, en el que las partes presentaron sus relatos, que son completamente contradictorios.

Según la versión de la Policía Local, una pareja de agentes estaba el pasado 4 de septiembre a las 20,45 horas en Vara de Rey pidiendo a unos adolescentes que retiraran los ciclomotores que tenían estacionados sobre un paso de cebra. En esos momentos apareció en moto, junto con su novia, el joven que ahora acusa al policía y dijo a los agentes que no podían tratar de esta forma a los adolescentes. Según este relato, le dijeron que circulara pero no hizo caso, lo que motivó las burlas de los adolescentes. Le pidieron la identificación y se negó a la vez que, a condición, exigía al agente que le mostrara su placa. Antes de llevarlo al retén, los policías condujeron al joven a Can Misses para dejar constancia de que no sufrió lesiones.

Por el contrario, el joven que acusa de malos tratos y vejaciones injustas al agente de la Policía Local asegura, al igual que tres testigos, entre ellos su novia, que oyó decir a este policía a uno de los adolescentes de las motos mal aparcadas que si no se callaba le iba a «meter dos hostias». Por este motivo, dice el joven, le dijo al adolescente: «Que sepas que no te pueden tratar así porque tienes tus derechos». Ante esto, el policía acusado le ordenó bajar de la moto y le pidió el DNI y el joven al agente que se identificara. Éste respondió que llevaba su número en la placa, pero el joven asegura que no se veía.