Los equipos médicos trasladan a uno de los heridos a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. Una vez más, el accidente ocurrió en la peligrosa

B. MUNAR / J. M. ALONSO
La carretera de Sant Antoni, una de las más peligrosas del verano español, sumó ayer a su tétrico expediente otro brutal accidente que, una vez más, se produjo de madrugada. Nada menos que seis heridos, tres de ellos graves. Uno de éstos, un joven italiano, se debate entre la vida y la muerte después de pasar por el quirófano de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. Los seis eran jóvenes, entre los 18 y los 26 años, cuatro españoles y dos italianos.

La Guardia Civil investiga las causas del accidente, pero se baraja la posibilidad de que uno de los conductores se quedara dormido y se cruzara de carril. De ahí el choque frontal. Los agentes hicieron el test de alcoholemia a uno de los conductores, que resultó herido leve, y dio positivo.

Un Seat León con matrícula 8709 BXT circulaba en sentido contrario a un Fiat Punto con matrícula B 5507 VF. En el primer turismo viajaban tres jóvenes españoles, que resultaron heridos de diversa consideración. Son M.E.B., de 19 años; F.A.V., de 18; y J.M.B., de 21. El choque se produjo a las 6:55 horas cerca del cruce de Benimussa, ya casi en Sant Antoni. Un tercer turismo se vio implicado, pero su conductora resultó ilesa.

En el Fiat iban J.C.T.S., español de 26 años; C.I., italiano de 22; y F.T., italiano de 25, que está en coma. Los tres están graves, pero el último es quien se llevó la peor parte. El golpe le causó estallido de hígado, fuerte lesión en el bazo, arrancamiento del colon, hemoneumotórax izquiredo (sangre y aire en el pulmón), contusión pulmonar derecha severa, rotura de pelvis y fractura de fémur. Los médicos temen por su vida. Los tres heridos graves están internados en la Policlínica y el resto ya fueron dados de alta de Can Misses. El español que viajaba en el Fiat, el segundo más grave, sufrió lesión de bazo y de riñón. El tercer pasajero sufrió lesiones faciales.

A muchos residentes les da miedo circular en verano por esta carretera y está justificado. La prensa británica ha bautizado esta ruta con el nombre de carretera de la muerte porque en su asfalto ha muerto cerca de medio centenar de personas en los últimos años. Recientemente, un coche que circulaba a gran velocidad partió en varios trozos a un ciclista, que recibió un golpe tan brutal que dejó la pelvis colgada en el tendido eléctrico. Este año, Eivissa ya ha contado 10 muertos en sus carreteras.