Un italiano de 30 años residente en un edificio de la Avenida 8 d'Agost de Eivissa fue detenido anteanoche por agentes de la Policía Local de Eivissa después de que supuestamente propinara sendas palizas seguidas a la joven con la que vivía. La víctima primero no quiso denunciar y se excusó con la policía tras requerir una primera ayuda y luego, en una segunda intervención, fue encontrada llorando y postrada sobre una cama.

El propio sospechosos, identificado como M.L.R. abrió la puerta a los policías cuando estos intervinieron definitivamente para acabar con las agresiones.

Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve de la noche después de que una patrulla de la Policía Local recibiera órdenes de acercarse al citado domicilio por una supuesta riña doméstica. Los agentes fueron recibidos por una chica que presentaba marcas en la cara, brazos y piernas. Cuando los policías se disponían a actuar, ésta les señaló que todo había sido una confusión y les pidió, pese a haberles llamado ella misma, que por favor se marcharan.

No pasaron ni diez minutos cuando la Policía Local recibió una nueva llamada. Los agentes volvieron a la casa y allí les fue franqueado el paso por M:L.R. En ese momento, su pareja lloraba desconsoladamente en la cama y presentaba lesiones mayores. Tras procederse a la detención del sospechoso, se trasladó a la afectada a Can Misses, centro donde quedó varias horas en observación.